Feliz y bendecido día para todos en Steemit, atendiendo la invitación de mi amigo @elsembradoran y @cotina, esta es mi participación.

Mi gato Shiró tiene 1 año con nosotros, desde que llegó a nuestras vidas, se ha desarrollado más nuestros sentimientos de amor y cariño, ha sido como nuestro amuleto de la suerte.

Cuando lo adoptamos, tenía apenas 2 meses de nacido, los primeros 15 días, se me orinaba en los muebles, además a menudo tenía que cambiar los forros de los muebles, lavarlos y con un spray aplicarles agua con vinagre para quitar el mal olor y hasta se me hacía caquita, ya me había arrepentido de adoptarlo porque pensé que eso iba a ser para siempre.

Le puse varias cajas al mueble para hacerle barrera y no pudiera hacer sus necesidades, me tuve que armar de mucha paciencia, hasta que se acostumbró hacer sus necesidades en la caja de arena, a los 4 meses no quiso usar más la caja, sino que lo sacara al jardín.

Todos los días a las 5:00 de la mañana, empezaba a maullar para que lo dejara salir al jardín, me daba pereza levantarme y él empezaba arañarme el colchón hasta que me decidía a levantarme, menos mal que ya se habituó salir a las 8:00 A.M., hora que ya estoy despierta y ahora me levanto antes que él, pero todavía le tengo su caja por si acaso.

A la hora de comer le servimos primero a él, en un rincón fijo de la casa, para que no esté pidiendo comida alrededor de la mesa, se acostumbró a comer en su lugar. Muchas veces, cuando sale al jardín los vecinos le ofrecen comida, él observa y se retira.

Todavía tengo algo que tengo que corregirle, a veces lo consigo montado en la mesa, cuando le digo que se baje, empieza a expresar pequeños maullidos de quejas, como diciendo, «déjame quieto», luego se estira y se hace el dormido.

Una amiguita de mi hija que se quedó una noche en la casa, se levantó temprano y lo encontró en la mesa, ella le dijo Shiró, «bájate de la mesa» y ella se sorprendió cuando lo vio, dio media vuelta y comenzó a expresar quejas con sus maullidos, porque se pone rebelde.