The Diary Game — 12/06/2021 - Luckily there are cats to distract me...

Hoy, primer día de esta nueva semana, post felino, totalmente orientado hacia estas bestias que, en determinados momentos del día, son un auténtico desastre natural, déjame explicarte mejor, haciendo una adecuada arenga contra ellas ...

En el primer plano, a estas alturas ya me había levantado desesperadamente, porque las señoritas no solo quieren comer temprano, habiéndose acostumbrado a ello, sino que cuando han comido, también les gusta que se abra la puerta cristalera de la sala de estar, para que puedan disfrutar de la vista del exterior, muchas veces caracterizada por la llegada de diversas aves, que van a picotear el pan rallado que ponen en el jardín ...

En el primer plano, la barriga gris había tenido a bien esconderse detrás de la cortina, antes de que abriera la puerta cristalera, en su cabeza se había escondido perfectamente, en el segundo plano había llamado la atención de la condesa de la casa, ese extremo, que que parece que no da pasos, sino que simplemente toca el piso, ya que es noble, como abrí se acabó el juego, y se movieron, tratando de darse una manita en el hocico, solo ser amistoso...

En esta toma pasamos directamente a las primeras horas de la tarde, qué lindos son, estos seres con múltiples personalidades, ya que recién en la madrugada, poco después de las 6 de la mañana, empezaron su show ...

La condesa entró en la caja de arena, luego de hacer lo que tenía que hacer, inicié la búsqueda de aceite, en el sentido de que comienza a rascar en la arena que parece estar buscando algo, en lugar de simplemente tapar el producto de su estacionamiento. en ese lugar específico (la mierda, en fin), después de haberme vigilado, porque hace un lío terrible, junto con la compañera de bocadillos felices vienen a mi cuarto, no maullan, saben que los golpean, se ponen ahí abajo, en alguna parte, a mis pies, saben que no duermo, que intento desesperadamente volver a dormir, y empiezan a lamerse, a hacer ese ruido característico que en medio de la dominante. silencio, como todavía tenemos las contraventanas cerradas, se oye, no hay nada que hacer, se puede sentir, o mejor dicho, yo lo siento, ellos lo saben y continúan, hasta que me levanto, tomado por la disolución abro bolsas de mojado, al menos comen y espero que se vuelvan a dormir ...