Poderosos consejos para ayudar a controlar el estrés cotidiano

El estrés puede ser una presencia constante en nuestras vidas. Se calcula que aproximadamente la mitad de la población estadounidense experimenta estrés en algún momento de su vida.

Aunque el estrés puede parecer inevitable, no tiene por qué dominar su vida si sabe cómo gestionarlo.

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Con los consejos y estrategias adecuados, puedes reducir los efectos negativos del estrés en tu bienestar y empezar a sentirte más relajado. Al fin y al cabo, el estrés es una emoción y las emociones no son algo que deba temerse.

En lugar de dejar que te controlen, sé consciente de cuándo se producen para poder tomar medidas para gestionarlas mejor.

Sigue leyendo para saber más sobre cómo puedes gestionar el estrés diario para reducir su impacto negativo en tu vida.

Manténgase activo cuando esté estresado

Muchas personas se sienten más estresadas cuando están bajo presión o cuando tienen mucho estrés. Si estás estresado porque intentas estudiar para un examen o superar un gran proyecto en el trabajo, intenta encontrar formas de aliviar la presión.

Estar activo cuando estás estresado puede ser justo lo que necesitas para reducir los efectos del estrés y volver a ponerte en marcha. Realizar algún tipo de actividad física cuando estás estresado tiene varios beneficios.

Los estudios demuestran que puede ayudar a aliviar la ansiedad, mejorar el estado de ánimo e incluso mejorar la concentración.

Los expertos recomiendan realizar actividad física en un momento en el que no se requiera el mejor comportamiento, como por ejemplo después del trabajo, cuando se está relajado y sin preocuparse por cosas que no querían preocuparse en primer lugar.

Planificar el día con antelación

Planificar el día puede reducir el estrés, ya que tendrás una sensación de control sobre lo que está sucediendo.

Cuando estás estresado y te apresuras a hacer cosas con pánico, puedes sentir que no tienes control y esto contribuirá a aumentar los niveles de estrés.

Planificar lo que hay que hacer con antelación puede ayudar a eliminar parte de la presión cuando hay que hacer cosas.

Planificar no significa que tengas que tenerlo todo previsto al segundo. Un poco de planificación puede ayudar mucho.

Por ejemplo, si tienes que estudiar para un examen, es posible que quieras fijarte un poco de tiempo antes de que empiece el examen.

Así tendrás tiempo para concentrarte y tener una buena sesión de estudio, de modo que no te sientas estresado por las prisas para cumplir con las limitaciones de tiempo del examen.

La planificación no sólo beneficia a los que tienen que hacer las cosas con una fecha límite. Puede ayudar a reducir los niveles de estrés cotidianos al darle una sensación de control.

Respirar correctamente

El primer paso para reducir el estrés es respirar correctamente. Se cree que un exceso de estrés puede conducir a una condición llamada hiperventilación, que ocurre cuando una persona respira demasiado rápido.

Esto hace que la persona se sienta mareada y se desmaye como resultado de la baja presión sanguínea y el aumento del ritmo cardíaco.

La hiperventilación es una señal de que hay que cambiar el patrón de respiración para que sea más lento.

Para ello, inhale durante 5 segundos y exhale durante otros 5 segundos. Esto le ayudará a ralentizar su respiración para que no respire tan rápido y no se sienta tan mareado.

Además de respirar correctamente, puedes intentar relajarte cuando no estés estresado. Intenta relajarte antes de tener que hacer algo estresante, como un examen o una presentación.

Esto dará a tu mente un poco de tiempo para desconectar y reducirá la sensación de estrés, ya que tendrás tiempo para calmarte y pensar con más claridad.

Sigue una dieta equilibrada

Llevar una dieta equilibrada puede reducir los efectos del estrés en el cuerpo. Muchas personas adquieren el mal hábito de saltarse las comidas y comer constantemente para hacer frente al estrés. Esto puede hacer que te sientas cansado por no comer adecuadamente.

Una dieta equilibrada le dará la energía que necesita para hacer las cosas y reducirá el riesgo de enfermar como resultado del estrés en su cuerpo.

Una dieta equilibrada debe incluir una cantidad saludable de proteínas y carbohidratos complejos.

Los carbohidratos complejos se encuentran en cosas como la pasta y el pan, mientras que las proteínas se encuentran en cosas como el pollo, el pescado o los huevos.

Incluye también muchas frutas y verduras en tu dieta y estarás consumiendo una dieta equilibrada que reducirá los efectos que el estrés tiene en tu cuerpo.

Desarrollar una rutina diaria

Nuestros hábitos diarios suelen ser los que nos ayudan a sentirnos relajados y tranquilos. Una rutina diaria podría ser hacer la cama antes de ir a dormir o dar un paseo durante la pausa para comer.

Esto le ayudará a reducir los efectos del estrés diario, ya que será menos probable que se sienta estresado cuando esté en su entorno.

Mantener su rutina diaria lo más normal posible también ayudará a reducir los sentimientos de estrés, ya que se sentirá menos estresado por las cosas si sabe lo que le espera. Mantener tu rutina diaria lo más normal posible también significará que no tendrás que preocuparte por sacar tiempo para las cosas que son importantes cuando te sientas estresado.

Una rutina diaria puede ayudar a reducir la sensación de estrés, ya que se sentirá menos estresado por las cosas si sabe lo que puede esperar. Además de mantener tu rutina diaria lo más normal posible, intenta mantenerte concentrado y al día con lo que estás haciendo.

Si te encuentras atascado o estancado en una rutina, intenta encontrar una forma de evitarla. Una rutina diaria puede ayudar a reducir la sensación de estrés, ya que te sentirás menos estresado cuando estés en tu entorno y estarás menos estresado si te mantienes concentrado y encaminado.

Encuentra un amigo de confianza con el que hablar

Puede ser útil tener un amigo de confianza con el que hablar cuando te sientas estresado. Esto se debe a que puedes compartir tus sentimientos y preocupaciones con un amigo de confianza y encontrar formas de resolverlos y trabajar juntos.

Un amigo de confianza puede ser alguien que conozcas bien, alguien con quien tengas una larga amistad o alguien que hayas conocido recientemente. Un amigo de confianza puede ser útil de varias maneras.

Por ejemplo, puede escucharte y darte el espacio que necesitas para trabajar tus sentimientos. Un amigo de confianza también puede darte apoyo y ánimo cuando lo necesites.

Palabras finales

El estrés puede percibirse como una sensación constante de presión, ya sea que esa presión provenga del trabajo o de la vida en el hogar, o de desafíos en otras partes de su vida.

La mejor manera de gestionar estos sentimientos de presión es identificarlos y saber qué los provoca.

Hacerlo te ayudará a trabajar con ellos y a identificar la mejor manera de afrontarlos. Mantener la rutina diaria lo más normal posible mediante una alimentación equilibrada y una rutina diaria le ayudará a reducir los efectos del estrés y a sentirse relajado cuando más lo necesite.