Esta mañana comencé el día con una pequeña actividad en casa. Elegí cocinar pollo frito, un menú que siempre es un favorito de la familia. Primero, mariné el pollo con especias especiales que hacen que el sabor salado se absorba mejor.
La pequeña, Azka, había comenzado a correr por la cocina, mirando con curiosidad lo que estaba cocinando. Por supuesto, inmediatamente me pidió que probara el pollo frito que acababa de sacar de la sartén.
El almuerzo también se sintió más delicioso hoy, con pollo frito crujiente y arroz caliente, todos nos reunimos para disfrutar de la comida juntos. Como siempre, estar juntos en la mesa del comedor es siempre el momento que más espero cada día.
Esa es una pequeña historia de hoy: desde lavar la ropa, cocinar hasta disfrutar del almuerzo con la familia. Se siente tan bien verlos satisfechos con lo que preparé.
Después de un almuerzo agradable, por la tarde decidí llevar a mi familia al mar. Disfrutamos de un tiempo de calidad allí, sentados y disfrutando de la comida y las bebidas que llevamos. La suave brisa del mar y el sonido de las olas rompientes se sumaron a la diversión de la tarde.
Todos, incluida Azka, nos veíamos muy felices. Azka trotó por la playa, mientras mi esposa y yo nos sentamos y disfrutamos de la vista y de los bocadillos que llevamos. No hay nada más agradable que ver a una familia sonriendo felizmente, especialmente mientras disfrutan de su comida y bebida favoritas en un lugar tranquilo como ese.
Esta tarde se sintió muy tranquila, brindando serenidad después de un día de actividades en casa y en la escuela. Regresamos a casa sintiéndonos satisfechos y felices, listos para continuar el día con más unión.