Saludos querido Diario y amigos de la Comunidad Latina, hoy seguimos inscribiendo y arreglando documentos de los niños en la escuela. Igual salí temprano para ganar tiempo ya que no había terminado mi parte del trabajo. Preparé desayuno, cafecito y me arreglè para salir, como siempre agradeciendo a Dios por todo lo que trae a mi vida. Estaba nublado y llegando a la escuela ya empezaba a llover. Días pasados vimos un racimo de topochos en el espacio de la cantina escolar, preguntamos en dirección y nos dijeron preparen algo con nuestra cosecha, ya que fue sembrada la planta por María una obrera de nuestra escuela. Pues no se diga más, enseguida nos organizamos y esto fue el producto de la jornada.
Pedí su colaboración a mi colega Dayana que ya había terminado su trabajo y a la autora de la cosecha. María con gusto nos ayudó. Pelamos los bananos, un grupo salió y compró lo que necesitamos y otro aportó las bebidas. A eso de las 10:30 ya estábamos disfrutando de los patacones. Éramos 23 personas y nos tocó a tres patacones con ensalada a cada uno, súper bien.
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Luego de terminar con mi tarea patacònica, me dirigí a mi aula a terminar mi trabajo, salí de la escuela a las 12:30, ya había llovido, pero seguía muy nublado, camine rápido a la parada para irme a casa. Deseaba llegar, mi rodilla estaba pidiendo reposo. Ya en mi casa me di un baño y no almorcé porque estaba satisfecha aun de la comida de la escuela. Pero no pude despreciar una rica merienda que me regaló mi hija Rubraska, una verdadera delicia.
Por la tarde y después de mi reglamentaria siesta, me dispuse a terminar un trabajo de investigación pendiente para entregar. En la noche esperé a mi hija que llegara de su trabajo para que ayudara a realizar unas etiquetas para las carpetas de los muchachos, ella tiene la habilidad de crear bellezas en la computadora, siempre me apoya en las actividades. Mi hija no quería cocinar en la noche y le escribió a nuestra amiga Jisel, para que nos enviara unas ricas hamburguesas caseras que hace para vender. Nos gustan mucho porque no les pone la salsa, la envía para uno la coloque a su gusto. Las vende a 2$ cada una y siempre pagamos entre todos.
Así concluye mi día querido diario, me acosté tarde viendo películas con mis hijas. Gracias Dios por estos momentos en familia.
Gracias por visitar mi post y apoyarme.
Imágenes propias tomadas con mi celular Tecno Spark. Para Comunidad Latina. 17/7/2024.