¡Uff! Al fin, ya puedo escribir, extrañaba estas horas, tenia unas ansias por escribir, dije que esto es como adictivo, aunque este blog siento que nadie me lee, ¿aló, steemiiit? ¿Wujuuu hay alguien ahí? Vacío, siento que nadie responde, de todas maneras estos blogs lo premia la constancia. Desde que me di el golpe he venido soñando cosas de un modo tan incoherente que no sé si fue producto del accidente o si en verdad tenían sentido, pero hoy analizando a la larga varios me di cuenta que si encajaban, me iban revelando o reflejando una pequeña parte de mi realidad. El problema era que no lo aceptaba, no encontraba como asociarlo o me confundía sobre el valor de ciertas cosas en mi vida.
Empecemos por descifrar dos sueños, mejor dicho pesadillas, en las dos era infiel, sentía a flor de piel la culpabilidad, pensé realmente que eso estaba ocurriendo, todo se sentía tan nítido, hasta que caí en cuenta de que era el mundo onírico, luego profundizando el sueño me percató que las dos chicas con la que fui infiel eran un reflejo de mi mujer, porque tenían algo físico y de su personalidad, y la culpabilidad es porque es un compromiso de lo más bonito y arruinarlo por una necedad banal es desvalorizarme. El tercer sueño es más angustiante iba caminando en la calle cuando una moto con una mujer como compañera pasaban cerca de mi, según por mi culpa la moto se detiene bruscamente y sufren un accidente, hay un escandalo de sangre que por sentido común dabas por hecho que la mujer estaba muerta.
Ya había pasado el tramoyo de mi golpe en la frente, ahora lo que faltaba, era otro problema mucho más grave que incluía muertos, leyes, cárceles etc... El pánico y terror que me abordaba era acongojante, al notar que solo soñaba sentía un alivio que clase de sustos recibía... Con el paso de los días los sueños han cobrado bastante sentido a excepción de algunas partes, no sé si estoy volviéndome loco o debería dejar de juzgarme tanto y ver que significado tienen los detalles que no logro adivinar. La gripe ha ido curando poco a poco, ahora lo que más me molesta es el dolor de garganta. He tenido unas inmensas ganas de leer, pero me da rabia que cuando tomo un libro pierdo el interés o no concilio un buen libro o soy yo con mi terquedad.
Tal vez tengo demasiado acumulado dentro de mi y leer me sobrecarga, creo que escribiendo aminoro esa carga, creo que hoy cuando despierte me irá mejor. ¿Será que ese golpe me ayudo? Siento que la inspiración ha vuelto, la fuerza de voluntad y madurez. Ya deseo sanarme por completo, que locura haber comprado unos zapatos deportivos para no usarlos por el golpe en la frente y esta gripe. Necesito ser paciente, el lado positivo es que volvió mi fiebre por los blogs, se siente genial retomarlo seguido sin rendirme ningún, no tengo la misma ímpetu que antes, siento que voy con más calma, y a la vez no tengo ganas de irme como antes sentía, retirarme a mi aposten, más bien ahora me siento como en casa.
Son ya las 3 am y sigo aquí despierto, sabía que no descansaría hasta plasmar mis sentimientos en este papel blanco digital. Mañana me despertaré a devorar un libro. No me parece justo escribir sin leer, pero creo que tampoco sería justo leer sin escribir, es un cambio justo y necesario. Cada día se acerca más octubre, ya deseo tocar el tiempo de libra, ¿Qué misterios me esperan?, ¿Qué retos?, ¿Qué etapa vendrá?, en el fondo de mi ser me deja claro que octubre será un mes inolvidable para mi, me preocupa... ¿Será bueno o malo? No logro evitar que será malo, o a la vez bueno, o ambos. ¡Ahhhh! Me desespera, ¡que pase el tiempo rápido!, cada día que pasa es como que si aumentara más y más la lentitud de los días, y llevo así desde hace 3 meses jajaja que tortura...
Es curioso como paso indefinidamente por un sitio y no me percató de ciertos detalles, paseando con mi novia me señaló un lugar que habían pintando, como una casita bien pintoresca, al observarla afirmo es bellísimo, ¿Cómo habré pasado por alto este grandioso detalle? Le da armonía, carisma y sosiego a la plaza, cuando el estrés y preocupación te crea una nube gris que te tapa cualquier rasgo de novedad y te instala en un automatismo, como un robot automático perdiendo la esencia humana, ¡ya basta! Despierta, hay más que números y cuadros en esta vida.
