Hoy me levanté después de una no planeada pijamada jajaja, ya que en la madrugada hubo algunas truenos, yo no quería dormir sola, así que me pasé a dormir con la bebe y mi hermana. Fue realmente un reto; la bebe tenía formas muy peculiares de dormir. Creo que estaba soñando que era karateca, jajaja. De cada rato, me pateaba las costillas.

Mañana con mi pequeñita y mi hermana
Después de la golpiza, jajaja, me levanté, cepillé mis dientes y fui a la cocina a prepararme mi desayuno: plátano frito y revuelvo dos huevos, y acompañé con un trozo de queso.

Mi desayuno
Luego de desayunar y reposar un poco, les cuento, amigos, que en sociedad con mi amiga hablamos de empezar un nuevo emprendimiento de postres. Quedamos en ir mañana a cotizar todo, ya que hoy es día de fiesta y no se podría porque todo está cerrado. Les contaré más detalles mañana.
Luego de ponerme de acuerdo con mi amiga, empezamos con la limpieza de la casa. Para el almuerzo teníamos unos huesitos de costilla, así que decidimos hacer una sopa con lo que tuviéramos en la nevera, jaja.
Cada quien hizo su parte con el aseo del hogar y después me ayudó picando algunos vegetales para la sopa. Mientras hacíamos todo con una buena música, aunque llevaba mucho tiempo, la sopa olía deliciosa y estaba quedando muy rica de sabor.

Sopa improvisada
Cuando finalmente estuvo lista y la probamos, quedamos muy orgullosas. Quedó demostrado que todo lo que se hace con amor queda bien, jajaja. Almorzamos juntas, y son los momentos que más apreciamos como familia.
Después de almorzar, jugamos piedra, papel o tijeras para ver quién lavaba los platos. Amigos, soy muy mala en este juego, así que perdí, jajaja. Me tocó lavar los platos, así que me puse manos a la obra.

Odio el juego
Al terminar de lavarlos, me di un baño y fui a la tienda a comprarle un juguete a la princesa para que viera televisión muy tranquilita mientras miraba las publicaciones y concursos interesantes en esta increíble comunidad.

El soborno
Al llegar la noche, después de cenar, salí un rato afuera para contemplar la noche. Mientras estaba sentada, miré hacia el costado y vi una media luna, o mejor dicho, un cuarto de luna amarillenta, tan pero tan cerca que sentí que la tenía en el hombro. Cuando me volví a mirarla...
Finalmente, para culminar mi noche, enciendo mi computador para relatar los acontecimientos de mi día y compartirlo con todos ustedes.
Agradezco mucho a cada uno de los que se toman el tiempo para leer mi publicación y dejar sus comentarios. Si quieren saber un poco más de mi y mis intereses aquí les comparto mi Logro 1.
Nota: todas las fotos y capturas fueron tomadas con mi teléfono Infinix Smart 8.

Foto de mi propiedad, realizada con canva