Me encanta recordar, porque es real lo que expresa la frase "Recordar es vivir"; cada vez que viajo con la mente a mi pasado, me llega esa nostalgia por lo vivido y que me ha dejado momentos, experiencias, enseñanzas y sabiduría.
Pero así como tenemos recuerdos alegres que nos encanta revivir, también tenemos esos momentos tristes que deseamos que nunca hubiesen pasado.
El 2 de enero, hace 8 años, partió de este mundo terrenal mi querida y siempre recordada cuñada, a quien todos le decíamos "Florecita" por cariño, y es que su verdadero nombre era Flor.
Una gran amiga, hermana y confidente, buena madre, esposa abnegada, excelente hija, la mejor nuera, etc. Todos los rasgos que recuerdo son positivos, aunque como ser humano seguro tenía sus defectos, pero bien ocultos.
Ella vivió con mi hermano más de 30 años y durante ese tiempo se dedicó a su hogar. Me demostró y enseñó por medio de su diario vivir el valor de la humildad, confianza, respeto, tolerancia, paciencia, pero sobre todo agradecimiento a Dios por todo, aun en los momentos más difíciles y dolorosos.
Me dejó el hermoso regalo de dos sobrinos a quienes amo con el alma, y si debo defenderlos, lo haré sin pensarlo, como si fueran mis hijos.
Recuerdo sus innumerables consejos, porque si algo tenía ella era mucha sabiduría para hacerme entender el porqué no o el porqué sí de cualquier consulta que yo le hiciera.
Siempre estaba sonriente y su comunicación era muy dulce; no recuerdo que alguna vez gritara, al menos que fuera para llamar a alguien que se encontrara distante. Todos la queríamos porque ella, gracias a su manera de ser, se lo ganó.
Extraño de ella su sonrisa, también su coquetería cuando echaba broma. Su voz cuando cantaba era espectacular. Florecita era una mujer entregada a Dios y cantaba precioso; de hecho, pertenecía a una coral y en muchas oportunidades la eligieron para ser la vocalista del grupo.
Cuando enfermó e informaron que tenía metástasis, me dediqué a cuidarla día de por medio; la complací en todo lo que quería, sin importar qué, hasta su último día en esta tierra.
Me queda la satisfacción de haber compartido con ella por muchos años y tener de esa gran mujer recuerdos imborrables.
Fotografías de mi álbum familiar.
Invito a participar a
@chiquitin,
@luisito01 y a
@rumanaafroz; aquí les dejo el enlace.
Llegó domingo de recuerdo.
¡Gracias por leer mi publicación! |
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