Buenas noches, he vuelto, hoy les traigo un breve ensayo sobre una conferencia realizada en el Pedagógico de Barquisimeto en una Cátedra llamada Comunidad, Ciudadanía y Responsabilidad Social, impartida por la Dra María Quintero, docente de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, en el Instituto Pedagogico de Barquisimeto, IPB.
En la actualidad la educación pasa por una serie de compromisos y desafíos que debe enfrentar, la gran pérdida de valores que se ven en muchas partes y el poco compromiso de la mayoría de los ciudadanos a cumplir con sus deberes hacen cuesta arriba la misma. Estos cambios que se deben generar en esta son un cambio total de paradigma o la forma de cómo se está construyendo el conocimiento, esto a su vez va a conllevar a un cambio estructural en la educación, con el principal objetivo de lograr los cambios necesarios en el currículo.
Muchas veces cuando se habla de currículo lo hace de una manera academicista y muy cargados de materias y cátedras que sus objetivos no coinciden y por ende los sobre cargan de contenido; en la actualidad las reformas de estos solo ha sido en contenido pero no en la forma como se imparte el conocimiento, no el papel humanista que deben tener los docentes dentro de un aula de clases, es decir estos cambios solo han sido académicos y no sociales.
Lo que se necesita en este momento es contar con los docentes que estén formados para la vida, con muchos valores éticos y morales, que puedan formar ciudadanos y no robots que solo están para trabajar y cumplir con sus metas personales pero sin aportar nada a la sociedad, deben ser profesionales de la educación que vayan más allá de lo monetario, debe ser un líder que mediante la investigación logre construir el pensamiento crítico en las personas. La Dra. María quintero en la presente ponencia expresa que:
No obstante, las instituciones hacen un esfuerzo por estar en sintonía con las circunstancias, sin lograrlo, quizás por el anacronismo institucional. En tal sentido, las escuelas, liceos, universidades e institutos de educación superior de formación docente, corren el riesgo de perder su función social; por ello es necesario replantear la educación, antes de seguir el camino de desconfiguración en el que ésta se sumerge cada día.
El contexto educativo debe siempre estar abierto a las reformas, de esta manera puedan surgir formas mucho más avanzadas de interpretar el conocimiento y la educación con una serie de procedimientos pedagógicos y epistemológicos bien marcados; muchos docentes han dado por terminada su tarea como formadores, sin saber que en momentos de crisis es donde pueden salir nuevas formas educativas y maneras más complejas de construir proceso pedagógicos, este momento es el perfecto para avanzar en el ámbito educativo, aquí es donde todos los formadores de la docencia deben abrir espacios para el debate de ideas donde se pueda aportar soluciones a esta crisis.
En la upel-ipb se está dando el primer paso, cambiando el diseño curricular que estaba activo desde el año 1997 y tuvo una revisión en el año 2007, al contextualizar este se está creando la oportunidad de mejorar la construcción colectiva del proceso pedagógico, donde se quiere crear docentes integrales que se adapten a su espacio de trabajo, forme ciudadanos ejemplares y además participe activamente en el proceso comunitario de su institución, es crear esa relación firme que debe haber docente-estudiante-familia-comunidad, donde cada uno aporta desde su espacio para la correcta formación.
Por esta razón es que las cátedras comunidad, ciudadanía y responsabilidad social junto con educación comunitaria, juegan un papel de suma importancia en los procesos de formación pedagógicas, con ambas se quiere formar docentes capacitados para afrontar el contexto venezolano actual que va más allá de una crisis política, porque es una crisis estructural que afecta a todos los niveles de desarrollo del país. Es por esto que como dice la Dra Maria Quintero en esta ponencia:
El profesional de la docencia que la UPEL-IPB forma, va en la expectativa hacia las propuestas de nuevas alternativas socioeducativas convencionales y no convencionales, impulsando así el desarrollo biopsicosocioespiritual y que al egresar este docente tendrá una capacidad de participación social consiente, reflexiva, participativa y voluntaria en beneficio del entorno social, utilizando estrategias pedagógicas y andragógicas que lo llevarán al desarrollo de un liderazgo en la toma de decisiones en pro de la democracia participativa, de autogestión y cogestión comunitaria como científico social que se ha formado para la convivencia social.
Como lo dice la cita anterior, el docente de la UPEL-IPB al egresar deberá estar altamente comprometido con el cambio social, tener una participación social y comunitaria totalmente activa con la comunidad donde este la institución en donde estará formando a los futuros ciudadanos de la nación y que estos a su vez ayudaran al desarrollo de la misma.
La educación actual viene marcada por procesos difíciles y es aquí donde los docentes jugamos un papel importante para contrarrestar el mismo, por esta razón se necesitan docentes totalmente comprometidos con el desarrollo educativo del país.
Para finalizar, los docentes que estamos formándonos debemos participar siempre en los procesos educativos, sociales y comunitarios donde se puedan formar a los ciudadanos que desarrollaran a la nación y con esto el país pueda salir delante de cualquier crisis, ser actores sociales en sus comunidades y participar en los procesos pedagógicos de las diversas instituciones.