Lunes de Escritura 15/05/2023 / La honradez

Hola querida familia de Steem Venezuela. Esta semana les comparto una nueva historia que como siempre busca crear conciencia sobre un aspecto de nuestras vidas y en esta ocasión reflexionaremos sobre la honradez.

Los valores se transmite de padres a hijos - Pixabay

Pedrito era un niño muy inquieto y siempre estaba dando problemas tanto en la casa como en la escuela, sin embargo cuando sabía que su padre llegaba de sus prolongados viajes obligados por trabajar como albañil para una empresa constructora, tenía un comportamiento distinto y más adecuado.

En una oportunidad estando en su salón de clases vio que a Gustavo por estar jugando con otros jovencitos se le cayó una pequeña consola de juegos de su mochila por lo que él la tomó y sin que se dieran cuenta se la metió al bolsillo y se la quedó para él.

Al día siguiente, en la Escuela la mamá de Gustavo fue a poner la queja por el robo que había padecido su hijo y ante la clase les dijo que aquel artefacto se lo había regalado ella a su hijo con mucho sacrificio como recompensa por sus buenas calificaciones, pero que no podía volver a comprársela porque su salario no se lo permitía.

La madre de Gustavo denunció la falta - Pixabay

Pedrito escuchó la queja de la mamá de Gustavo y vio la tristeza en el rostro de él y por un momento quiso levantar la mano y acusarse por aquella mala acción, pero la vergüenza pudo más y para evitar el bochorno de que todos se enteraran de que él había sido el culpable y lo etiquetaran de ladrón no dijo nada.

Ese sábado su padre llegó luego de una semana fuera de la ciudad y para compensar su ausencia llevó a Pedrito a comer helado al centro comercial cercano a su casa y cuando llegaron a la heladería el sitio estaba completamente lleno por lo que tuvieron que esperar un rato hasta que una pareja se levantó y ellos aprovecharon para ocupar ese puesto. Al sentarse el papá de Pedrito notó que en su silla había un celular de última generación y sin pensarlo dos veces lo tomó y fue corriendo hasta donde estaba la pareja y se los entregó. Estos les agradecieron y le ofrecieron dinero pero él no se los recibió.

En la heladería - Pixabay

Entonces Pedrito, viendo la actitud honesta de su padre sintió remordimiento por haber tomado aquella consola que no le pertenecía y decidió contarle a su padre lo que había hecho. Su papá le aconsejó que debería regresarla, que hablara con Gustavo a sola y le pidiera perdón por el mal causado.

Pedrito, luego de llorar un rato por su mala actitud le pidió a su padre que pasaran por la casa para buscar la consola y luego lo llevara a casa de Gustavo para entregársela. Así hicieron y cuando llegaron a la casa de Gustavo, este los atendió y Pedrito le entregó la consola pidiéndole perdón.

Gustavo no entendía por qué lo había hecho, sin embargo al ver a Pedrito llorando y arrepentido de lo que había hecho le dijo que lo olvidara y que se la quedara porque su abuelo había llegado ese fin de semana a pasar unos días con ellos y al enterarse de que había perdido su juguete le había comprado uno nuevo. Ambos niños se abrazaron y desde ese día Pedrito y Gustavo empezaron una amistad que duró toda su vida.