Mares de plástico: Un grave problema medioambiental

Fuente: https://cadenaser.com/programa/2016/09/01/hora_14_fin_de_semana/1472743165_317186.html

Puede que no lo sepa, pero cada vez que come, bebe o incluso respira, está ingiriendo plástico. Es cierto que son partículas minúsculas, pero la exposición permanente a ellas puede suponer una amenaza aún desconocida para nuestra salud. Y esto es solo una pequeña parte del problema, ya que investigadores de diversos paises han calculado que hay más de 5 billones de piezas de plástico en el océano. El 80% provienen de la tierra y muchos de estos objetos acaban acumulándose en las grandes profundidades. El plástico, además de tardar decenas de años en descomponerse, provoca daños graves a la fauna marina.

Platos, vasos, botellas, bolsas, cubertería, pajitas y envases. Vivimos rodeados de plástico y cuando nos deshacemos de él puede acabar en un vertedero, ser reciclado o incinerado. Pero en ocasiones termina en el mar. Un globo tarda más de 6 meses en descomponerse. Una bolsa de plástico, más de 50 años. Un mechero, más de 100. Y una botella, más de 500. Son objetos que dañan gravemente a la fauna marina. Cada año, más de 1 millón de aves y más de 100.000 mamíferos marinos mueren como consecuencia de todos los plásticos que llegan al mar.

Fuente: https://elpais.com/ciencia/2020-11-23/microplasticos-el-veneno-del-mar.html

En un artículo de la revista Science Advances, el ecologista industrial Roland Geyer, de la Universidad de California en Santa Bárbara, Estados Unidos, calculó que el volumen total de todo el plástico producido en el mundo desde hace 70 años, cuando se comercializó, fue de 8.300 millones de toneladas

Según el mismo informe, de dicho total, unas 6.300 millones de toneladas son residuos, y el 79% de ellos se encuentran en vertederos o en el entorno natural. Es difícil calcular de forma precisa cuánto plástico hay en mares, aunque las cantidades se presumen insostenibles. Se estima que unas 10 millones de toneladas de plástico acaban en el mar cada año. Se calcula que, de mantenerse el ritmo, en 2050 habrían 12.000 millones de toneladas en vertederos y en el medioambiente. Según un artículo de la revista Science, el tamaño de las zonas sin oxígeno o muertas en los océanos se ha cuadruplicado desde mediados del siglo XX por culpa de los efectos de los plásticos, mientras que las zonas con muy poco oxígeno cerca de las costas se han multiplicado por 10. Esta situación puede producir la extinción masiva de especies, algo que tiene un doble riesgo: por un lado, puede acabar con un modo de vida y de alimentación de mucha zonas del planeta y, además, afecta la capacidad de los océanos para retener CO2.

¿Qué soluciones se plantean?

Estados Unidos y China son los principales responsables por el peso de sus economías, ha sido la Unión Europea quien más en serio se ha tomado el problema. Para ello, ha propuesto una serie de soluciones integrales que atacan a todos los aspectos del problema, así como las causas de fondo. El objetivo general es eliminar toda la contaminación dañina para 2050, reduciendo la polución a niveles que no sean dañinos para la salud y los ecosistemas naturales, según documentos de la Comisión Europea vistos por Bloomberg News. La Unión Europea también tiene como objetivo reducir las muertes prematuras por contaminación del aire en más del 55% para 2030.

Además, quiere reducir a la mitad el uso de pesticidas químicos y la venta de antimicrobianos para los animales de granja y la acuicultura.

La estrategia apunta a una reducción de un 50% en la cantidad de plástico en el mar, un recorte de 30% en la cantidad de microplásticos liberados y que el 75% de los suelos estén sanos.

¿Qué podemos hacer para ayudar?

A parte de las soluciones que propone la Unión Europea, nosotros también podemos aportar nuestro granito de arena poniendo en práctica cosas tan sencillas como estas:

Evita los plásticos de un solo uso, como la pajitas, los platos o los cubiertos desechables.
Si vas a hacer la compra, no te olvides de llevar una bolsa de tela o un carrito.
No tires los chicles al suelo ya que estos también están hechos de plástico.
Compra más alimentos a granel y menos productos empaquetados.
Sustituye los tuppers de plástico por recipientes de cristal o acero.
Evita el uso de cosméticos con microplásticos y opta por la ropa biodegradable.
Apuesta por el reciclaje y dale una segunda oportunidad a ciertos envases.
Debemos prestarle más atención al cuidado del planeta donde vivimos ya que es el único que tenemos. No hay que dejarle a las futuras generaciones problemas que podemos resolver en el presente.