Al levantarme como es habitual en la mayoría de los seres humanos en la actualidad, reviso los mensajes en mi teléfono.

Mi hermana me escribió: "no salgas de la casa".

Y yo le respondí: ¿por qué, cuéntame más?

_{Bailarina, la mascota de mi hermana, madre de los cachorros, quien ha estado bastante enferma últimamente.}

Mientras esperaba que mi hermana me respondiera, abrí la puerta y dejé salir a Manchita y Kakita de la casa, ellas suelen dormir en el patio, pero desde que iniciaron las lluvias, las dejo dormir adentro, porque en el pasado los sapos se meten por debajo del portón y Manchita se los ha comido, en varias oportunidades casi muere por envenenamiento.

Generalmente esto ocurre de noche que es cuando los sapos salen, de día permanecen ocultos o son fáciles de encontrar y sacar del patio.

No quiero volver a vivir esta experiencia. Esta semana debo solucionar ese problema para que puedan volver a dormir en sus camas.

_{Manchita y Kakita, siempre a la espera de que les de comida.}

Los mensajes de mi hermana empezaron a llegar.

Me contó que ya habían confirmado muchos casos de coronavirus en Montalbán, algunos son vecinos de ella y supuestamente cerca de mi casa hay alguien en cuarentena. Además en Bejuma, nuestro pueblo vecino, hay tantos casos que están metiendo presos a las personas que salen de sus casas después de las 5pm.

Le escribí a mi ex-esposo y padre de Sebastián, él vive en Bejuma, para preguntarle como veía el panorama y me confirmó todo. No lo dejan salir por carretera a su trabajo y tiene varios días en su casa, para colmo de males, me dijo que su sobrino, había tenido el COVID hace unas semana pero que no me lo había dicho para no preocuparme.

Por el amor de Dios, yo soy la madre de su hijo, mi trabajo es preocuparme.

Las noticias que había temido recibir desde hace 1 año, finalmente son reales. El Coronavirus ha llegado a mi pueblo.

Ciertamente, tenemos más de un año con medidas preventivas, para evitar que ocurriera, pero muchas medidas irresponsables hicieron que todo el trabajo se desperdiciara y finalmente el coronavirus encontró la puerta para entrar.

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Desayunamos e hice lo contrario al consejo de mi hermana. Salimos de casa.

Y es que, necesitamos provisiones para aguantar el aislamiento, además tengo un niño con necesidades médicas y recreativas.

Primero compré algunos alimentos, para complementar la reserva. La cual afortunadamente en estos momentos está bien surtida. Pero es mejor que sobre a que falte. También compré bombillos y una linterna LED, pues cuando empiezan las lluvias, suele irse la luz.

Después pasé por la farmacia a preguntar precios para las medicinas de Sebas, debo cambiar casi 40 steem para poder comprárselos, esta semana.

Estábamos cerca de una juguetería que siempre esta cerrada, pero esta vez la encontramos abierta y entramos.

Le había prometido a Sebas desde hace tiempo que le compraría juegos de mesa, pero la juguetería siempre estaba cerrada o no tenían nada que le gustara.

Esta vez tuvimos suerte y logré comprarle un juego de cartas de UNO y un pequeño tablero de Ajedrez. Entre los dos solo gaste $7 USD.

Sebastián estaba FELIZ, porque por fin tendría sus propios juegos para ganarme. Aunque yo no soy la clase de madre que se deja ganar tan facilmente.

_{Juegos de mesa, para pensar y aguatar el aislamiento en casa.}

Luego de las compras fui a visitar a mi hermana, para ver como seguía bailarina, quien había estado muy enferma por una vacuna que le pusieron mal y el líquido se le corrió, luego cuando la fueron a curar, la enfermaron aún más. Estuvo a punto de morir, pero gracias a Dios y a los cuidados de la familia y otro veterinario mucho más eficiente. Ya podemos decir que está salvada.

_{Local propiedad de mi mamá, estacioné la moto allí porque había más sombra y menos gente, tengo un proyecto de construir una terracita arriba, pero por ahora esta en Standby, porque hay otras prioridades médicas que atender primero.}

Hablé con mi hermana sobre la salud de mi mamá y la preocupación por el COVID ya que ella esta mayor y es persona de alto riesgo por sufrir de asma y tensión.

Decidimos hablar con ella a ver si se viene conmigo a mi casa. Le he dicho muchas veces, pero nunca cede. Esperamos que desista de su actitud y se resguarde en mi casa, que es más aislada que el resto.

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Le dije a Sebas que era hora de irnos, pero me dijo que aun no, en ese momento mi prima-vecina me escribió para que le comprara unos panes, así que le dije a Sebas que tenía 20 minutos más mientras yo compraba los panes.

Salí a la única panadería que quedaba abierta, al ser Domingo y casi las 5pm, ya todo estaba cerrado y la gente se estaba encerrando en sus casas.

Cuando pedí los panes, vi que tenían un letrero de, "Se venden salchichas polacas" pregunté el precio y me dijeron que 5.000.000 el kilo. No lo creí y pregunté de nuevo, para mi estaban súper baratas un aproximados de $ 2,5usd. La mitad de lo que vale un kilo de carne.

Pedí un kilo de salchichas y un paquete de panes para perros, sorprendería a Sebas al llegar a casa.

_{Ya que no podremos salir a comprar más combitos de perros, podremos hacerlos en casa de forma más segura para todos.}

Busqué a Sebas y ya había terminado de jugar. Hicimos escala donde mi mamá y le dije que por favor asistiera al médico y se hiciera revisar el dolor en la barriga que no la deja vivir en paz.

Después de hablarle como niña chiquita nuevamente. Regresamos a nuestra casa a comer perritos calientes.

Sin embargo, no me había alcanzado para comprar las papitas, así que piqué una papa en tiritas delgaditas y las freí en bastante aceite para que no se pegaran.

Me quedaron perfectas, algo grandes, pero igual de sabrosas.

_{Papitas fritas para perros.}

Nos sentamos a comer y jugar ajedrez en el nuevo tablero de Sebas. En esta una de nuestras primeras comidas en aislamiento real.

_{Comiendo y jugando.}

_{Fotos tomadas con un Teléfono Lenovo K8Plus.
Editadas con la App de SnapSeed.}