Hola amigos de esta bella comunidad de #steemvenezuela , hoy en lunes de escritura quiero compartir con ustedes lo que sucedió en el pueblo de Saucedo con su Santo Patrono.
EL 24 de junio de 1995 sucede un hecho que llenó de mucha tristeza a los habitantes de Saucedo, la señora Levis de Salazar y Nery Salazar se dirigieron a la iglesia, para limpiarla, faltaban poco para celebrar las fiestas patronales del pueblo y se dieron cuenta que San Pedro había desaparecido, no se encontraba en el altar, empiezan a solicitarlo entre algunas personas solícitas a la iglesia, pero nada, es entonces cuando se hace la alarma y comienza la búsqueda en concreto.
Desde ese momento la gente del pueblo triste y desconsolada buscaban por todas partes una pista para encontrarlo. Esta tristeza se agigantó más, cuando llegó el 29 de junio y el santo no estaba, para ser venerado en sus fiestas patronales; ese día toda la comunidad se volcó a una peregrinación para celebrar su día, pero la desdicha nos invadía, hicimos la procesión mas triste a nuestro santo, por primera vez la fiesta se hizo sin él, le cantamos el cumpleaños feliz en la iglesia, no podíamos aceptar que no estaba, lo queríamos entre nosotros, llantos, oraciones, molestias; todo cabe cuando se pierde algo de valor, sobre todo tratándose de una imagen religiosa como es el santo patrono de nuestro pueblo.
Muchas sospechas, nada confirmado, San Pedro quedó perdido. Fue uno de los momentos mas tristes que ha vivido el pueblo de Saucedo, pero nunca perdimos la esperanza que iba a aparecer.
Pasó casi un año de su desaparición, cuando un día la alegría volvió a los corazones de los habitantes de Saucedo. Una mañana del 10 de abril de 1996, estaba el señor Julio González en su conuco y cual seria su sorpresa, cuando cortando unas malezas, pudo observar debajo de unas hojas secas un pedazo de yeso, el cual llamó su atención , se acercó apartando las hojas; sus vellos se erizaron y no podía creer lo que veía , era San Pedro. Fue tanto su asombro y con lágrimas en sus ojos, que corrió desesperadamente hasta el pueblo con la gran información del hallazgo de nuestro santo patrono. En ese momento empezaron a sonar las campanas y los cohetes, anunciando que el pueblo se abocara a la iglesia para darle la gran noticia.
Casi todos corrieron hacia el conuco en busca de la imagen, lo trajeron descolorido, comido de comején y alimañas, luego lo llevaron a la iglesia y lo mandaron a restaurar en Río Caribe, Estado Sucre.
Cuando restauraron a San Pedro, todo el pueblo fue a recibirlo a la entrada de Saucedo, había quedado más hermoso que nunca, los cohetes, la emoción, el encuentro fue especial. Lo veíamos sonriente, sus ojitos nos decía ¡Estoy de vuelta en mi pueblo! nuevamente en el altar de la hermosa iglesia de Saucedo quedó San Pedro Apóstol.
Para el momento, se cree que San Pedro ha realizado numerosos milagros y los habitantes de Saucedo, cada día que pasa lo veneran aumentando así su fe.
Espero que les guste