Mi creencia sobre la muerte

  Hablar de la muerte a veces puede ser un tema controversial o en su defecto, incómodo para algunas personas porque, de esta fase del ciclo de la vida surgen teorías emocionales y racionales que no todos asimilamos igual. En lo personal, me parece que es un tema interesante de analizar por ello, estoy complacida de unirme a la dinámica Buena Vibra. Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  Gran parte de nuestra existencia transcurre escuchando la expresión "La muerte es lo más seguro que tenemos" y, a pesar de que es así, solemos ser muy renuentes a la llegada de este ciclo natural de la vida por ello, cuando un ser querido o conocido muere; nos desconcertamos e incluso, llegamos al punto de rechazar dicho ciclo.

  La muerte es un suceso totalmente irreversible en el ciclo de la vida. Sin embargo, en las diversas culturas que existen alrededor del mundo se ha desarrollado una o varias creencias sobre ella y, aunque a veces solo se dice que son mitos, la ciencia también se ha pronunciado al explicar qué podría ocurrir cuando la vida terrenal finaliza por lo tanto, hoy día se dice que estamos cerca de saber qué sucede cuando morimos.

  La muerte comenzó a ser un tema de conversación familiar para mí cuando tenía 8 años ya que, con el fallecimiento de mi abuela, mi familia me explicó que este suceso es la fase final de la vida y, aunque escasamente recuerdo que después de estas conversaciones comencé a decir que el cielo era la casa de todos los que se iban a tomar café y comer pan con Dios, hoy día pienso que dichas tertulias me enseñaron a ver la muerte como un proceso natural que todos los seres vivos tendremos; tal vez algunos antes de que se cumplan las fases de la vida completa pero, de que lo experimentaremos, lo experimentaremos.

  El suceso de la muerte no me genera terror; sin embargo, admito que cuando pienso en que en algún punto de mi vida va a llegar, percibo esa inexplicable sensación que genera el apego que tenemos hacia la vida y, creo que esto lo origina el desconocimiento que tenemos respecto a qué es lo que realmente sucede cuando morimos.

  Desde mi perspectiva, la vida tiene dos dimensiones; la primera es el ciclo que desarrollamos cuando estamos en el mundo terrenal y, la segunda es aquella que comienza después de nuestra desaparición física en la Tierra. En vista de esta percepción que tengo; todo no concluye con la muerte ya que, cuando fallecemos, le damos inicio a un proceso de metamorfosis que mientras estemos en este mundo, no sabremos como es pero, de que debe haber algo más allá, lo hay porque, la muerte también es el suceso que le abre la puerta a nuestra alma para que ahora sea ella quien tiene la potestad de todo lo que sucederá.

  Soy consciente de que este punto de vista puede tener una visión muy surreal pero, honestamente me cuesta mucho trabajo creer que la muerte sea la conclusión de todo el ciclo de la vida porque, soy partidaria de creer que todo tiene un proceso de transición y aunque ninguno de esos sucesos son iguales, son necesarios para avanzar en el ciclo del más allá.

  Tal vez parezca muy fantasioso mi punto de vista pero, soy del gremio que piensa que; cuando morimos nos vamos a reencontrar con todas esas personas especiales que formaron parte de nuestra vida mientras estuvimos juntos en el plano terrenal por ello; sí creo que el amor sobrevive a la muerte y, sé que cuando algo experimenta un proceso de metamorfosis cambia absolutamente todo, creo que cuando se trata del amor real o genuino hacia nuestros seres queridos, este se mantiene porque nace del vínculo que desarrollamos con ese alguien en particular con quien nos estamos reencontrando en esa dimensión desconocida.

  Cuando tuve el problema con la depresión, todo en mi estaba muy descontrolado y, aunque cuando se habla de este trastorno solamente se enfocan en el desequilibrio emocional, también hay una gran alteración neurológica muy comprometedora. Debido a ello, cuando estaba en ese proceso complicado, presenté una alteración en mi cerebro que generó en mí la pérdida de consciencia durante 3 minutos y, a pesar de que para mí solo transcurrieron segundos; los médicos dijeron que tuve todos los signos que ellos siguen para declarar a una persona muerta.

  Les confieso que todo lo que sucedió durante ese tiempo, para mí es desconocido y, lo único que recuerdo es que cuando estaba comenzando a recuperar la consciencia, escuchaba unas voces en especie de eco que decían "La estamos recuperando" y, en ese momento sentía asfixia e incluso cansancio.

  Esta experiencia para mí no tenía una definición exacta porque, mi personalidad lógica siempre me lleva a tener una respuesta comprobada a las cosas, me complicaba entender lo que había sucedido; sin embargo, conversando con un médico y religioso pude comprender que, esto fue un evento cercano a la muerte y, no me fui porque aún tengo cosas por cumplir en este mundo mortal.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{Las imágenes presentadas en esta publicación fueron editadas en la herramienta de diseño Canva y tienen exclusividad para esta publicación}