Nunca es tarde para empezar de nuevo

  Iniciar un nuevo capítulo en nuestra vida, es un obsequio que todos debemos darnos en algún momento porque, la evolución no tiene hora de caducidad. Partiendo de esto, me complace decir presente en esta dinámica ya que, empezar de nuevo fue y sigue siendo el mejor acto que podemos hacer. Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  Empezar de nuevo es una acción que muchas veces nos genera temor y, en lo personal considero que ese miedo está erróneamente fomentado en nosotros porque, darle inicio a una nueva oportunidad es sinónimo de crecimiento por lo tanto, todo lo que sea de evolución debemos aplaudirlo y si para ello hay que iniciar algo nuevo, se debe asumir como una extraordinaria oportunidad para crecer.

  Si viajo un momento al pasado voy a recordar que también fui víctima de ese temor. Sin embargo, en el momento más comprometedor de mi vida una persona muy especial se acercó a mi de una manera amorosa y me ayudó a comprender que si me atrevía a escribir una nueva historia en mi vida focalizada en el presente y futuro, me reencontraría con esa Pahola que tanto extrañaba y de manera desesperada me estaba pidiendo a gritos que la rescatara del abismo de depresión donde estaba en cautiverio desde hace muchísimo tiempo.

  Les confieso que, vivir ese proceso de cambio ha sido una de las 3 cosas más difíciles que he experimentado en mi vida porque, este inicio implicaba perderme en mí misma para posteriormente encontrarme y así emprender un proceso de reconocimiento interno porque si de algo estoy convencida es que, cuando llegó esta mano amiga ya no recordaba cómo era cuando comencé el proceso de desvanecimiento durante la etapa de mi adolescencia.

  Gracias a la decisión de comenzar una nueva historia en mi vida, puede emprender el camino que me ayudó a superar la depresión y aunque más de una vez pensé que no lo iba a lograr, gracias a mi familia y ganas de querer vencer, lo hice. Cabe destacar que, durante este proceso tuve que aprender a conectar de nuevo con la vida, además de mi familia y mis amigos más cercanos porque había perdido esa conexión. De igual manera rescaté a esa Paholita que me obsequió tanta felicidad durante mis primeros años de vida y, aquí quiero dejar presente que; abrazarme para poder empezar un nuevo episodio, ha sido el acto más sanador que he ejecutado en toda mi existencia y lo volvería a hacer todas las veces que sea necesario ya que, un abrazo tiene la facultad de ser la mejor vitamina que le damos a nuestra alma.

  Emprender ese camino donde vamos a vivir un nuevo comienzo no es fácil. Sin embargo, recorrer ese trayecto nos permitirá comprender que el inicio no conoce de horarios porque, solo es cuestión de actitud y decisión querer iniciar ese ciclo que nos permitirá avanzar con fluidez.

  Sin duda alguna, tomar la decisión de comenzar una nueva historia donde la depresión ya no tenía lugar en mi vida la ejecuté en el momento perfecto y gracias a ello afirmo que es el mejor inicio que siempre resaltaré como el más hermoso que he tenido y aunque ya tengo 11 años de haber emprendido este comienzo, reconozco que sigo sintiendo que estoy viviendo esta aventura en tiempo presente porque, todos los días me levanto con la convicción de que viviré al máximo y mi visión de vida está centrada en que cada día tengo miles de oportunidades para escribir la mejor historia de mi vida y si en una ocasión me caigo, me levanto con firmeza porque no nací para vivir en el suelo pero sí para volar en total libertad.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{Las imágenes presentadas en esta publicación fueron editadas en la herramienta de diseño Canva y tienen exclusividad para esta publicación}