Lunes de Escritura: Hacer a Pesar de la Desmotivación/#club5050/@10%hive-193637

Saludos cordiales y un abrazo a la distancia, en este lunes dedicado a la escritura quiero exponerles un análisis sobre una reflexión que leí hace días, relacionado a esos días donde uno debe insistir en hacer las cosas así se sienta desmotivado.

Todos los seres humanos pasamos por procesos difíciles, convivimos con sentimientos donde hay presencia de dolor y también de felicidad; algunas situaciones que nos bajan el ánimo pueden llegar incluso a instalarse en nuestras vidas por tiempo determinado; expertos en salud mental recomiendan no limitarse a sentir las emociones, pero también es cierto que así nuestro panorama de aflicción no se transforme de la noche a la mañana de la noche, debemos hacer cosas, avanzar porque sí.

Existirán personas que ponen en práctica lo que menciona el escrito y otras quienes creerán que la solución es pasar días desmotivados esperando de la nada recuperarse; realmente no puedo indicar cuál sería la salida correcta, pero si puedo mencionar desde mi experiencia personal que incitar en nosotros mismos acciones incluso con la carga del dolor te va recargando nuevamente, hasta que de pronto llega un momento en que estás caminando nuevamente.

He pasado por eventos dolorosos que han estado conmigo más de lo que hubiera deseado, sin embargo he salido básicamente gateando de la cama, insistiéndome en regresar a mis hábitos, es quizás lo único que me ha hecho salir de tal situación.

Cuando uno menos piensa está allí otra vez Renaciendo y lleno de vitalidad; sé que hay parajes muy fuertes, que a veces la tristeza no se transforma en alegría por arte de magia; pero también sé que hay cosas que uno debe hacer por sí mismo y más nadie hará; actuar aún con desmotivación nos irán activando nuevamente y quizás sea lo único que nos haga retomar el carril.

Es seguro que en este momento muchos estamos allí rotos, resistiendo ante la sequía, batallando ante algo, no se trata de aparentar lo que no sentimos; podemos confesar ante seres queridos lo que nos aqueja, ir a orientación psicológica; pero dependerá más de nosotros esa transformación que tanto anhelamos.

Debe ser Ley de Vida apostarle a la Valentía y ser Valiente un día simplemente puede significar salir a la calle con el nudo en la garganta; ir sin ánimos al trabajo, llevar al niño al colegio, adquirir alimentos y pare de contar.

Ninguna especie en este planeta se desarrolla sin un nivel de presión, de crisis; es de humanos que esas estadías nos pueden llevar a pasar etapas de subidas y bajadas emocionales; es probable que en nuestra naturaleza tengamos almacenado un pequeño nivel de energía para esos días… Porque como algo que muy pocos saben explicar, de la nada sacamos fuerza CRECEMOS Y EVOLUCIONAMOS.