Cuenta la leyenda, que en las riveras de una selva, en el Perú, a orillas del rio Santa Bárbara, muy cerca de unos farallones, vive un ermitaño terco, pero muy terco.
Su morada es un paraíso, pequeña choza, con todas sus comodidades, rodeada de muchos árboles y plantas, frutales, medicinales y hasta ornamentales, donde armonizan animales de variadas especies, iguanas, loros, monos y las que nunca pueden faltar en toda selva, las serpientes, pues como es un paraíso aquí en la tierra, el terco ermitaño se llama: Adán.
Anciano, de buenos principios, educado y servicial, que a pesar de vivir solitario, es muy respetado y querido, por los habitantes de los alrededores.
Es un soñador, que le encanta escribir y narrar, a niños, jóvenes y sobre todo a las mujeres de su época, historias y cuentos inverosímiles, de naves voladoras y de cometas fugaces, que el mismo desarrolla en su mente ya senil, inspirado en el cielo inmenso, repleto de estrellas, que el contempla en la soledad de sus oscuras noches.
Como todo Adán en el paraíso, vive soñando, añorando y deseando, en el transcurrir del tiempo y a pesar de su avanzada edad, que una de sus tantas naves voladoras o estrellas fugaces, le traiga a su regazo una ermitaña terca que se llame: Eva.
Para así, darle un final feliz a la historia de la creación y poder probar de la fruta prohibida.
(Anzoátegui-Venezuela)
Legend has it that on the banks of a jungle in Peru, on the banks of the Santa Bárbara River, very close to some cliffs, lives a stubborn but very stubborn hermit.
His home is a paradise, a small hut, with all its comforts, surrounded by many trees and plants, fruit, medicinal and even ornamental, where animals of various species harmonize, iguanas, parrots, monkeys and those that can never be missing in every jungle, snakes, because as it is a paradise here on earth, the stubborn hermit is called: Adam.
Old man, of good principles, educated and helpful, who despite living alone, is highly respected and loved by the surrounding inhabitants.
He is a dreamer, who loves to write and narrate, to children, young people and especially to women of his time, improbable stories and tales, of flying ships and fleeting kites, which he himself develops in his already senile mind, inspired by the immense sky, full of stars, that he contemplates in the solitude of his dark nights.
Like all Adam in paradise, he lives dreaming, longing and wishing, in the course of time and despite his advanced age, that one of his many flying ships or shooting stars, brings him a stubborn hermit named: Eva .
In order to give a happy ending to the story of creation and be able to taste the forbidden fruit.
(Anzoátegui-Venezuela)