Washington: una técnica de detección que el ejército estadounidense utiliza actualmente para controlar de forma remota el aire y detectar sustancias químicas, toxinas y patógenos potencialmente mortales ha inspirado un nuevo instrumento que podría "olfatear" la vida en Marte.
El instrumento Lidar Bio-Indicator, o BILI, es un lidar basado en fluorescencia, un tipo de instrumento de detección remota similar al radar en principio y funcionamiento.
Sin embargo, en lugar de utilizar ondas de radio, los instrumentos lidar utilizan luz para detectar y, en última instancia, analizar la composición de las partículas en la atmósfera.
Aunque la NASA ha utilizado instrumentos de fluorescencia para detectar sustancias químicas en la atmósfera de la Tierra como parte de su investigación de estudios climáticos, la agencia hasta ahora no ha empleado la técnica en estudios planetarios.
"La NASA nunca lo ha usado antes para la exploración planetaria a nivel del suelo. Si la agencia lo desarrolla, será el primero de su tipo", dijo Branimir Blagojevic, tecnólogo de la NASA en el Centro de Vuelo Espacial Goddard en Greenbelt, Maryland.
Blagojevic, quien anteriormente trabajó para Science and Engineering Services, LLC, que desarrolló el sensor, aplicó la tecnología para crear un prototipo de instrumento, demostrando en las pruebas que la misma tecnología de detección remota utilizada para identificar los peligros biológicos en lugares públicos también podría ser eficaz en la detección de biofirmas orgánicas en Marte.
La belleza de BILI es su capacidad para detectar en tiempo real pequeños niveles de materiales orgánicos complejos desde una distancia de varios cientos de metros, agregó Blagojevic en un comunicado de la NASA.
Por lo tanto, podría buscar de forma autónoma biofirmas en penachos por encima de pendientes recurrentes, áreas que no son fácilmente atravesadas por un rover que lleva una variedad de instrumentos in situ para análisis químicos y biológicos detallados.
Además, debido a que podría realizar un análisis de aerosoles a nivel del suelo desde lejos, BILI reduce el riesgo de contaminación de la muestra que podría sesgar los resultados.
"Esto hace que nuestro instrumento sea un excelente instrumento complementario de detección orgánica, que podríamos usar en conjunto con espectrómetros de masas de tipo sensor de punto más sensibles que solo pueden medir una pequeña cantidad de material a la vez", dijo Blagojevic.
"Las mediciones de BILI no requieren consumibles distintos de la energía eléctrica y se pueden realizar rápidamente en un área amplia. Este es un instrumento de inspección, con un olfato para ciertas moléculas", señaló Blagojevic.
Con una herramienta de este tipo, que también podría instalarse en una nave espacial en órbita, la NASA podría aumentar drásticamente la probabilidad de encontrar biofirmas en el sistema solar, agregó.
"Estamos listos para integrar y probar este novedoso instrumento, que sería capaz de detectar varias biofirmas orgánicas", dijo Blagojevic.
