¿El benevolente?

Hey, Hola. Soy Luis Ángel Velásquez Vielma, les contaré una “anécdota”. Sobre mí en estos días en los lugares que suelo frecuentar…

Hoy, 10 de diciembre de 2017, me levanté con unos ánimos no tan positivos, pero a causa de esto al pasar los minutos vine con un objetivo en mente. ¿Cuál? Estar excelente, al igual que lo estuve en un momento no tan lejano de esta semana. Primero antes que nada al ver el clima; nublado y un toque oscuro, me hizo sentir así, jaja. No me puedo quejar, cuando me encuentro de tal manera pienso que llegan los mejores momentos para realizar actividades que me apasionen con total plenitud, el sentimiento que queda al finalizar dicho elemento, me libera y ayuda a quedar en un estado de regocijo porque el contemplar tal obra que he realizado es de total encanto, o por lo menos para mí. Tal vez suene algo egocéntrico, cosa que no me gusta, la cuestión es que quiero, y soy, lo más honesto y sincero, tanto conmigo, como con los demás. De allí proviene uno de mis tantos apodos, “Benevolente”. Sí, ese que se encuentra en el título. Mi falta de malicia se nota en demasiados sentidos, mi bondad desbordante se refleja en mis acciones (cuando son bien captadas) y en la mayoría de las ocasiones, en mi mirada, la cual es algo depresiva, jaja. Anhelo el amor puro y no dañino, deseo el no ser lastimado, ni el de yo poder lastimar a los demás. Aspiro el lograr escribir mejor para honrar a todo aquello que me ha inspirado. Desde mi familia, pasando por los amores que me han flechado sin precedentes, la naturaleza incluyendo sus “defectos”, el universo, a este le prosigue un largo y enorme listado de otros factores.

Recuerdo como empezó todo, fue por mi hermano Angelo, me inspiro el verlo enamorado, aspecto que desconocía de él, y sigo sin conocer de mí, supongo… Amo y quiero de verdad con demasiada intensidad, no odio y jamás me he enamorado. Irónico por mi forma de pensar. Leer poemas, o ver algo relacionado a lo romántico es suficiente como para impulsarme a empeñarme a escribir, a veces solo necesito algo que me haga latir con esmero. Es más, me hizo revivir en mi memoria de manera constante la primera frase que escribí, en el primer escrito que regale hace ya un año aproximadamente, el cual fue creado por haberme enterado que le gustaba a una encantadora señorita, se la dedique por las incontables ideas que causaba en mí. En fin, esto es lo que considero mi frase favorita:

Con esto finalizó mi presentación, tengo 16 años y vivo en Caracas. Le agradezco a mi hermano por darme un empujón para entrar en este mundo. Si tienen alguna crítica constructiva, con gusto los leeré. Algo que me gustaría agregar es que me fascina escribir primero en mi libreta extremadamente grande de 384 páginas que deseo saturar con mi corazón, alma y mente.
Cabe aclarar que las fuentes de las imágenes son mías, la última fue editada por mí.