Si al abrir soñolientas las puertas del corazón aquella mañana fuese un error por estar en mi niñez, el tiempo no me diría lo contrario, pues fuiste la llave que dio paso a que entrara en mí la mas bonita forma de “QUERER Y SENTIR” y aunque hoy solo eres pasado para mi siempre seras... el presente mas anhelado.
Te describo así.
Como paisaje desbordante produces turbulencia en el alma, formando una mezcla entre querer transmitir y ser oído. Pones como condición para llegar a ti que cambie de rumbo para unirse a tu destino, descargas tu furia si te separan de la libertad que te han concedido. Tus méritos son el tesoro que guardas con celo, porque van al paso de tus triunfos y derrotas.
Destino: regalo para los dos.
Soy tu aliada, cuando la inseguridad toma la lucidez de tu alma, soy tú confidente, en los instantes que prefieres desahogarte, soy tu descanso cuando consigues libertad a tus pensamientos, en mí encuentras apoyo cuando no hay alguien que escuche y sienta tus logros, viajo a través de ti, para tener en cada si y en cada no la verdad de tu decaer, para poder darte ánimo y que comprendas que detenerse no es la solución, contigo aprendí a compartir y saber cómo comportarse con las personas. Agradezco a Dios por obsequiar-nos esta amistad que sobrevive a nuestras propias diferencias.
Dar a conocer.
Soñar es fácil cuando tu recuerdo esta en mí, reír es difícil cuando te siento distante, decir te quiero no es fácil para alguien que lo siente por primera vez, si estás conmigo cada atardecer es una razón más para existir, saber llegar a tu corazón es sentir tus pensamientos en mí, conocer la felicidad, es creer estar presente en ti, demostrarte mis sentimientos sinceros es enseñarte el nítido horizonte que no tiene fin, creer leerte este corto escrito es querer que estés junto a mí.
Continuara...
Autora: Dania Yorley Gutierrez Blanco