Puedes volar más alto de lo que puedes imaginar.

A lo largo de mi viaje, tuve el placer de conocer a personas que tienen un gran potencial, porque en mi vida he tratado con muchas personas, y con el paso de los años he desarrollado un sexto sentido para reconocer el potencial.

Estoy seguro de que solo sobre este tema puedo compartir muchas historias, muchas enseñanzas que la vida me ha enseñado, pero para este breve post, quería hablar sobre un amigo en particular.

Fue especial para su crecimiento, para ver su cambio de mente de ser un empleado a alguien que quería más para su vida, alguien con un sueño. Pero tomó mucho trabajo llegar allí y, por supuesto, mucha paciencia.
Una de las cosas que solía decirle mucho era: "Algún día lo entenderás, pero por ahora escúchame". Recuerdo cómo mis palabras lo frustraban, pero sabía que con el tiempo él comenzaría a entender su propio valor. Y dejen ir sus miedos.

Fue un proceso lento para él darse cuenta de que no necesitaba la seguridad falsa de su trabajo diario, que también podría ser un empresario. Podía ver su potencial, sabía que tenía las materias primas adecuadas para tener mucho éxito, si tan solo pudiera dejar de lado sus temores.

A veces lo llamaba al trabajo, le daba consejos sobre qué decir y qué hacer, y él respondía: "Necesito trabajar, no puedo hablar por teléfono en este momento", su miedo era muy real. Podía oírlo en su voz. Pensó que si intentaba improvisar y crecer fuera de exactamente lo que se le había dicho, probablemente se metería en problemas. Créeme, la vida es tener iniciativa y ser creativo.

Después de más de un año de hacer negocios juntos y tener muchas conversaciones, comencé a ver un cambio en la forma en que valoraba su trabajo, su confianza. De repente, dejó de sentirse atrapado en un trabajo que realmente no le gustaba, y ahora creía que tenía opciones. Pero la verdad es que siempre tuvo opciones, simplemente nunca las vio.

Hay una vieja historia que me contaron hace mucho tiempo sobre los elefantes; Cuando son bebés, atan una de las piernas a un palo, para mantenerlo quieto. La mente del elefante se condiciona, y cree que está atrapada, que no puede moverse por el resto de su vida, incluso cuando pesa toneladas y puede arrancar un árbol del suelo si quisiera.

Los humanos y su potencial son de esa manera, pero primero tenemos que aprender a reconocer nuestra libertad, a reconocer que siempre tenemos una opción.

Espero que todos estén bien, saludos.