Locamente juguetón, amado y fiel...
No necesito hierbas
Me escribes, amor, sobre el ascenso desde el alféizar de la ventana.
Y con quien no te arriesgarías por ti.
Sería mejor si se metiera en la concha.
Me despido por última vez...
Es un niño de cuentos de hadas, mamá, claro, lo sé.
Y cuando hago la puerta de la casa o incluso del alma.
Él pintará las oficinas, porque los íconos caerán de inmediato.
Rusia es ahora escasa
Convertirse en parientes del otro.
Venderá fábricas sin vender, compañías offshore en el extranjero,
La cera rompe el sello.
Espera, mi Ucrania natal.
Impuesta por las fundaciones
Pavimentar la carretera entre arboledas de peonias,
Pero solo tu idea
Su deseo de frenar, e incluso olvidarlo,
Me encanta bailar misteriosamente bajo la luna.
¡Cuán pocos los que dicen: perdoné!
Y no deberías estar enojado,
Solo por fe nos llevamos en el corazón.
Y en la tarde a casa
Maldita sea vio una terrible desgracia.
Y para todos, interpretará pegasus jazz.
Y susurro lentamente para cantar algo.
Vas lleno de sueños.
Quien no soy yo
Los que vendieron la ciudad y los que los compraron.