Todos sabemos que nuestro sistema solar no empezó siendo ese lugar tranquilo que conocemos. En un principio, estaba lleno de planetas, protoplanetas y otros cuerpos qu rondaban por el espacio. Estos chocaban, y muchos de ellos no se salvaban de aquellas colisiones catastróficas. Lo cierto es que estas colisiones eran provechosas de alguna manera, siendo que ese material que era expedido al espacio estaba rico en minerales; muchos de ellos muy raros o nunca vistos en la naturaleza de nuestro planeta.
Todos estos choques eran tremendamente común en el tiempo cuando los planetas gaseosos aún no se estabilizaban en sus órbitas y no habían alcanzado suficiente tamaño.
En este artículo, analizaremos un material que fue encontrado en un extraño meteorito protoplanetario de unos 200 gramos.
Una roca muy extraña en Australia
Durante la década de los 50, Australia estaba buscando oro. En tanto que esa búsqueda continuaba, uno de los trabajadores consiguió una pequeña roca que no se parecía a nada a 4,5 km cerca de la ciudad. Esta roca era semi alargada y tenia una tonalidad oscura y rojiza. De una vez, los pobladores la llevaron para ser examinada, y efectivamente, era algo que nadie nunca había visto en la Tierra.
Dentro de esta roca, se encontraron minerales muy extraños que parecían más bien fusiones de materiales distintos que encontramos en la naturaleza. Uno de esos minerales era como una mezcla de oro y hierro. Su tonalidad rojiza y negra sugiere que este espécimen de meteorito pudo haber viajado 1 millón de años proveniente de otro sistema solar hasta llegar a la Tierra. Lo cierto es que después de 1951, el meteorito ha sido cortado en muchos pedazos para desentrañar sus misterios, hasta que finalmente pudo encontrarse algo totalmente nuevo: la escotita (edscottite)
La escotita es un mineral muy raro compuesto por un alto contenido de carbono de hierro. Este mineral no existe en la naturaleza pero si ha sido creado por científicos en laboratorios. Sólo allí lo hemos visto. Se caracteriza por presentar unas líneas horizontales de carbono de hierro.
Se piensa que la edscottite se formó cuando el sistema solar apenas se estaba formando, gracias a las múltiples colisiones. Se piensa que este extraño mineral por la inmensa presión en el núcleo de un protoplaneta que explotó y expulsó una inmensa cantidad de minerales raros, entre ellos la escotita. Claro, esta teoría sólo aplica a este pequeo segmento de roca que llegó del espacio. Pero en definitiva se cree que la escotita pudo haberse formado en el núcleo de protoplanetas debido a las condiciones extremas.
Es posible que hayan muchos oros minerales que no hayamos descubierto aún. Los científicos se preguntan si es posible que algún día llegue a la tierra material de alguna otra civilización extraterrestre o mejor aún, si es posible que existan minerales como la escotita aquí en la Tierra. La verdad es que hay demasiados trozos de asteroides y protoplanetas viajando por el espacio y nada que los detenga. Así que cabe esta posibilidad.
El astrofísico Adam Frank propone que pueden haber más de estos minerales extraños ya que para él, es muy probable que haya existido una civilización anterior a nosotros aquí en la Tierra. El problema es que la Tierra ha cambiado tanto geológicamente, que ha sido imposible comprobar esto. Lo mismo afirma el astrónomo Jason Wright, basado en un estudio del 2017, donde arroja la posibilidad de que efectivamente sí pudo haber existido una especie tecnológicamente avanzada antes de la humanidad tal y como la hacemos.
La geología del planeta aún sigue haciéndonos una mala pasado cuando investigamos los orígenes de la Tierra. Todo queda en seguir investigando los meteoritos caídos más y más.