Se estima que el hacker pudo tener acceso a 500 megabytes con un par de documentos clasificados, se rumorea que uno de los archivos es de la misión Curiosity en Marte.
Se cree que este ataque empezó desde el 2018, logrando infiltrándose con una computadora Raspberry Pi la cual logro conectarse al sistema JPL. Esto ocasiono que la central en efecto desconectara temporalmente los sistemas de control de vuelos espaciales.
De igual forma el atacante tuvo acceso a varias redes principales limitando a que la NASA no le quedara de otra mas que desconectarse definitivamente de la JPL para evitar que obtuviera mas información.