En Italia está entrando en vigor un bloqueo parcial para frenar el aumento de la tasa de infección, con restricciones similares a las vigentes ahora en España, Francia y Bélgica.
Los bares y restaurantes italianos ahora deben cerrar a las 18:00 y los gimnasios, piscinas, cines y teatros permanecerán cerrados hasta al menos el 24 de noviembre. Los casos diarios confirmados se han elevado por encima de los 21.000. Hubo protestas en Nápoles, con empresas exigiendo indemnizaciones, y hoy están previstas protestas en Milán y Turín
España tiene ahora un toque de queda en vigor entre las 23:00 y las 06:00, inicialmente durante 15 días, pero podría extenderse a seis meses. Eso es difícil en un país donde la gente tradicionalmente come fuera de noche. España ha superado el millón de casos desde que empezó la crisis. Las regiones ahora pueden imponer restricciones de viaje, y las reuniones de diferentes hogares están restringidas a un máximo de seis personas.
Las autoridades sanitarias francesas dicen que el país puede estar recibiendo 100.000 nuevos casos al día, el doble de la cifra oficial. El profesor Jean-Francois Delfraissy dijo que la cifra estimada incluía casos no diagnosticados y asintomáticos.
La República Checa se encuentra entre los países más afectados de Europa y se acaba de instalar un hospital de campaña de emergencia con 500 camas en las afueras de Praga. El servicio de mesa ha terminado en todos los puntos de venta de alimentos, las escuelas se han movido en línea y todas las tiendas no esenciales han cerrado.
