Recogidas del aire, provenientes de otras habitaciones,
golpean con constancia la prodigiosa simiente
sus afligidas interpretaciones,
hasta que le han confundido lo suficiente
para demostrarles que camina
siguiendo el sendero
que lo lleva por su propia agonía.
Tratando de repetir el ciclo
tratando de corregir el fallo
precarios enseres le colman la existencia
herramientas ventajosas
para una distorsionada sombra
menos real que sus desatinados temores.
¿Que encontrara para que vivan una sonrisa?
Marchitas recompensas que nunca dividió,
las cuenta a briosos cristales de agua
compactados debajo de su vuelo
mientras acarrea mas ironía
la carga que lleva su cansado lomo.
Tan grande el destino,
todas las rutas lo encuentran,
allí se disuelven los pensamientos
mezclándose en un obscuro hábitat,
estirándose saldrá su mano a relucir un vano deseo de su alma,
no durara mucho extendida,
entrara en ella una mas pequeña,
la llevara por las sombras de todas las mentes,
le encontrara sin cargas, le encontrara cabal
se perderán por siempre en el maravilloso cometido,
encontraran su fin entre decadentes paredes,
levantaran otras, las que sean necesarias.