Un día desperté sin nadie a mi lado, esa mañana mi cuerpo sintió frío.
Ese frío no había hecho su gran entrada, llegó sin avisar. Le conté a mis sueños sobre ti, juraron guardar el secreto, mintieron.
Mi alma, mi ser, mi conciencia, todos sabían de ti y de como me hacías vivir.
Me introduje entre las sábanas para darme calor, tus manos no rodeaban mi cintura esa mañana, ni esa tarde, ni nunca más desde aquello.
Mis ojos cerraron sus puertas a la luz, soñé una vez más y mi piel se erizó, recordarte me trae enferma.
Cuando despierte te habré olvidado, seré la flor de mi vida, creceré hasta que mis raíces me detengan.
Cuando despierte seguiré mi vida, lo haré cada mañana hasta la puesta de sol, hasta que mi corazón deje de latir, hasta que me quede sin aliento.
Las alucinaciones llegarán al atardecer cuando me haya perdido en las curvas de tus labios.
Cuando despierte.