Llego la luna llena una vez más, esa que durante toda mi vida me ha acompañado, ella que me vuelve poeta, la que me duele al verla porque me hace recordarte.
Era una noche callada en las calles de mi corazón, mi mente agotada con lo recuerdos, los recuerdos ocupados viviéndose una y otra vez
Abro la ventana de mi habitación y allí estaba ella,
La mire fijamente mientras un sigiloso y sutil viento rosaba mis mejillas.
Mi mente comienza a recordarte, mientras mi corazón comienza a acelerar su ritmo cardíaco, ese que solo se acelera cuando estoy contigo, otra brisa vuelve a tocar mi rostro, sin darme cuenta, cierro mis ojos, mi mente le hace el juego a la luna, esta me hace una jugada y allí estas tu frente a mis ojos, estos quienes desesperados buscan los tuyo, esos ojos color cafés, que me hacen delirar, busco justo a tu encuentro, me miran fijamente sin mediar ni mencionar una palabra, tu mano acaricia suavemente mis mejillas, uno de tus dedos se posa suavemente por el lunar rosa, que tu muy bien conoces del lado derecho de mis labios, ese que envuelve nuestro misterio y gran secreto al encontrarnos cuerpo a cuerpo.
Estoy a punto de enunciar una palabra mientras acercas tu humanidad hacia mí, me abrazas sutil pero apasionadamente, siento el calor de tu cuerpo, siento llegar a casa, en tus tibios brazos, donde sin vacilar acobijo mi cara en tu pecho, siento tu loco corazón latir como un animalito salvaje, apretó mis labios para seguir callada, así disfrutar del momento, levanto la mirada, tus ojos siguen los míos, como siempre ellos hablan lo que el lenguaje no puede expresar, son capaces de decir los más maravillosos te amo que pueden existir , me pierdo en ellos nuevamente mientras te estampo un sutil beso en tus pequeños labios temblorosos, al encontrar los míos quedo extasiada en ellos , siento como en mi cuerpo sucede algo genial, mi sangre se acelera, es algo mágico, puedo sentir como si fuese un campo cuando florece, como cuando cae el agua que los alimenta , mi piel siente reverdecer en amor tan profundo, siento tu respiración , pero de repente una briza fría toca e invade mi cuerpo y una lagrima va rodando por mi mejilla abro mis ojos, no estas, solo es la fría soledad de la noche, en frente de mi sigue la luna llena mirándome despiadadamente.
Fuente: escrito con prosas desde el corazón, la foto es tomada de Internet.