La gente a veces deja objetos olvidados. Pero dudo que alguien haya olvidado un objeto como el que yo olvidé...

Todos los días, al regresar del trabajo, solía yo pasar por la panadería comprando pan. La panadería queda a una cuadra de mi apartamento. La mitad de las veces, voy caminando.

En cierta ocasión, como todos los días, regresando del trabajo pasé por la panadería y compré unos panes. Llegué a mi casa y no estaban mi esposa ni mis hijos. Supuse, correctamente, que estaban en la iglesia. Deberían volver, a más tardar, a las 9:30pm. Como a esa hora no habían regresado, imaginé que en la iglesia había vigilia quincenal hasta la media noche, así que me acosté a dormir. Como a las 12:30am, escucho la voz de mi hija que dice:

—¡mira!... ¡papi sí está aquí!...—

y mi esposa dice:

—ah.. estás aquí... ¿y dónde dejaste el carro?—

Me levanté de un salto:

—¡¡¡Lo dejé en la panadería!!!—

Salí corriendo a la calle... el sitio estaba totalmente oscuro... de terror...

Por suerte no le pasó nada. Tal vez porque nadie lo vio en esa oscuridad.

Curiosa historia sobre un "pequeño" objeto olvidado.

Créditos del texto: Amaponian Visitor (@amaponian)
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