La idea de que la auto-investigación o lo que muchos desean ver como una fiscalización interna a puertas locales; no termina ni por internar nada ni menos el de generar otros elementos para superar los temas a debatir y generar políticas en los otros candidatos, debido a que ya pasó por alto todo esto y lo referente a ello; logrando ser demasiado buen como elemento de actividad política para ser verdad.
Cuántas veces en política no dejan de estar las sorpresas, porque mucho más plausible es que el Partido Republicano se sentara en él, dadas las expectativas de potencialmente cambiar un escaño.
También sabemos que los demócratas descubrieron parte de esta información, así como los medios locales y la mencionaron (cosas como la organización benéfica inexistente), pero nada como la red de mentiras que hemos visto desde entonces.
Hay una parte de mí que todavía tiene dudas de que habría perdido la carrera si el Partido Republicano hubiera hecho pública la información que tenía. Quiero decir, la información conocida sobre George Santos ya era bastante mala incluso antes de que descubriéramos que es el talentoso Sr. Ripley.
Me alegra ver que los republicanos locales al menos le piden que renuncie, incluso si los republicanos del Congreso no tienen el coraje de hacerlo. Supongo que con el tiempo esto llegará al punto de ser una carga excesiva para el Partido, pero no dejaría de lado a McCarthy para esperar hasta que Santos sea condenado. Porque muchas de las cosas ya se vienen venir, pero necesitamos el desenlace final.
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