POEMA: DESPEDIRNOS SIN DECIR ADIOS

¡Llegó aciago momento!
Anuncia triste partida,
lamentable sentimiento,
no quiero tu despedida.

¿Está mi Dios enojado?
¿No escucha mi súplica?
Con fe y amor le pido,
un milagro por mi chica.

Perdido clamo un beso,
pues no puedo detenerla,
aunque haga gran esfuerzo,
e implore para amarla.

Gimiendo sin llorar vierto,
lágrimas de impotencia,
son horas de sufrimiento,
ensayos por tu ausencia.

Mi corazón destrozado,
si ya no te tengo, queda,
triste poeta enamorado,
ella me ama y se aleja.

¡Amor mío! ¡Dulce corazón!
¡Quedate conmigo! ¡Te vas!
¡Siéntate y entra en razón!
¡Tonto soy, no tienes culpas!

Soledad de mi suplicio,
me enloquece su sombra,
hablemos, dame indicio,
del retorno que me honra.

Es justo y necesario,
decirme adios vida mía,
viviré este calvario,
aunque sufra mi agonía.

Olvidarte yo no puedo,
sí recordarte cada día,
adios no digo, ¡no debo!
de pena, quizá moriría.

Me despido, con un ¡te amo!
y quererte a distancia,
nuestro amor no ha muerto,
pero se va tu fragancia.

Protervos que han causado,
crisis social que conduela,
¡nefastos! han separado,
familias en Venezuela.

ESTE POEMA ES 100% DE MI AUTORÍA

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