San Valentín salvaje

Un 14 de febrero me encuentro solo escuchando a mis compañeros hablar sobre sus planes de hoy con sus parejas, eso solo hace entristecerme más. Al concluir mi jornada de trabajo tomo la decisión de ir a un bar para no estar solo en mi casa. Al llegar veo un lugar medio vacío, todo debido a que las parejas están compartiendo en lugares más especiales que este. Al llegar a la barra, todo entristecido, pido un trago. Al fijarme bien, veo a una hermosa cantinera que ha robado mi atención por completo.

Con el transcurrir de la noche y los trago, poco a poco la cantinera y yo fuimos estableciendo una conversación agradable y pícara. Luego de más de cuatro horas entre tragos y risas surge la idea de irnos a un lugar más privado.

Al llegar al motel, con solo cerrar la puerta de la habitación, ella me salta encima y me arranca la ropa con mucho desespero, entre besos y pequeños mordiscos baja por mi abdomen hasta hacerme sentir un placer exquisito. Luego le quito la ropa mientras beso su cuello, al estar toda desnuda comienzo a besar todo su cuerpo, tomo una botella que trajimos del bar y vierto un poco sobre su abdomen y comienzo a chuparlo todo. Luego ella se pone sobre mí y comienza a cabalgarme hasta llegar al clímax ambos.

Luego de terminada una noche tan salvaje y llena de sexo placentero puedo decir que pase un san valentín muy agradable, incluso mucho mejor que otros.