Hay muchos factores que han causado que el desanimo este presente dentro de las aulas de clase, no solo a nivel universitario desde donde les puedo hablar con experiencia debido a que trabajo como docente en una universidad, sino también en todos los niveles educativos. Uno de esos factores es la economía, en el caso de la universidad muchos prefieren dejar de estudiar para trabajar y así colaborar con la manutención de su familia, puesto que con un solo sueldo en un hogar no se dan abasto; otros han preferido buscar nuevos horizontes en otro país que pueda darles esa estabilidad que requieren. En el caso de escuelas y liceos, muchas veces la familia no puede costear los estudios del niño / adolescente, hay ocasiones en donde si hay varios niños solo pueden ayudar a uno, es una realidad bastante triste que estamos viviendo donde hasta los mismos adolescentes o niños deciden dejar su educación para colaborar en casa de alguna manera.

No es solo el alto costo de los materiales escolares lo que dificulta que podamos darles la mejor educación a nuestros hijos, también está la alimentación y el transporte.

La realidad dentro de un aula de clases cambio, como docente tratas de no generar gastos en la medida de lo posible y tienes que tener un poco de flexibilidad extra para comprender que a veces los alumnos no podrán llegar al aula por cosas como que no consiguieron efectivo para sus pasajes o la ruta universitaria no salió o que no pudieron realizar las actividades porque no había electricidad u internet, buscas evitar casi a toda costa que los alumnos abandonen, aunque no siempre depende de ti.

En el caso de la carrera donde soy docente, usualmente se hace una proyección sobre las secciones que se abrirán en el año (se trabaja mas que todo anual, la carrera es trimestral). Cuando se realizaron las inscripciones de este ciclo, vimos con preocupación la poca afluencia, incluso tuvimos que dar una semana mas para las mismas, así los rezagados podrían inscribirse y tener claro cuantas personas estarían en total. Las cargas académicas tuvieron que modificarse puesto que donde calculamos que habría 3 secciones solo se inscribió la cantidad suficiente para llenar solo una sección y aun así no seria la cantidad con la que normalmente se venia trabajando. Hace 3 años cuando ingrese a trabajar, me fue asignada una sección con 52 personas, todas las secciones estaban repletas, sin embargo, ahora no creo que haya 52 personas en todas las secciones de un trayecto completo.

Otra fuente de desanimo para los alumnos es el hecho de que debido a que la deserción también esta presente en la parte docente, donde muchos han decidido emigrar, y quienes quedan ocupando esos puestos son asignados en su mayoría gracias al trafico de influencias mas no por que se cumpla el perfil necesario. Esto hace que las clases no se lleven como deben ser, los alumnos pueden pensar que están perdiendo su tiempo, esfuerzo e inversión por lo que deciden desertar. Debido a que el trafico de influencias esta en auge otro pensamiento que tienen los alumnos es: ¿para que me va a servir esforzarme en obtener mi titulo universitario si el cargo / puesto, será para los que tengan “palanca”? Una pregunta que aumenta el desánimo y la desmotivación. La mayoría esta esperando su titulo para emigrar si no lo han hecho antes.

La situación se ha tornado tan preocupante que la principal indicación que se nos dio a los docentes es mantener la matricula que tenemos, cosa que escapa de nuestras manos en algunos casos. Nuestros horarios de trabajo fueron hechos de modo que no tengamos que ir los 5 días puesto que eso implica gastos, en algunos casos hemos tenido que llegar a acuerdos con respecto a los horarios con los alumnos para evitar que ellos también tengan que ir los 5 días y ayudarles a minimizar un poco sus gastos, para ello nos hemos valido de la ayuda de diversas herramientas tecnológicas que tenemos a la mano.