Capitulo 1:
No todos nacemos iguales en este mundo, o debería decir estos mundos, hace mucho tiempo una raza extraterrestre invadió la tierra, durante muchos años de lucha la humanidad llego al borde de la extinción pero de repente aparecieron “los doce” humanos genéticamente alterados con la única misión de destruir a estos seres, los doce recibieron el apodo de los caballeros de la mesa redonda, debido a su tenacidad en el campo de batalla y gracias a ellos la humanidad pudo ganar, al pasar el tiempo los descendientes de estos caballeros también desarrollaron poderes y así comenzaron los linajes, un linajes es el parentesco genético que tienes con uno de estos caballeros al principio solo era un linaje pero con el paso de las generaciones los linajes cambiaron hasta llegar a tres, debido a la diferencia nuestro mundo se dividió en tres clases:
Los tris: son aquellos que poseen tres linajes, se encargan de gobernar y proteger los mundos, habitan en alpha un planeta creado durante la guerra, son los mas fuertes.
Los twos: son aquellos que tiene dos linajes, crean tanto las armaduras como las armas de todas las clases y dirigen gran parte de las empresas de comercio, son casi tan fuertes como los tris pero no lo suficiente, viven en el planeta omega un planeta lleno de belleza y encanto.
Los one: son aquellos que poseen un linaje, ellos participan en el comercio y ayudan a los two en las batallas, viven en la tierra cabe destacar que solo un pequeño porcentaje tiene un linaje tri, aunque no tanto el two, por lo tanto los one son los mas numerosos.
Por supuesto esta sociedad no es perfecta ya que los que no tienen un linaje están destinados a vivir en miseria debido a que esta sociedad se basa en los linajes, mientras que los que lo poseen tienen una vida llena de privilegios y adulación y en este mundo loco vivo yo.
Todos los día me levanto como siempre temprano y sin mucho ruido, vivo en la ciudadela la mas grande ciudad de la tierra, en un orfanato, nunca conocí a mis padres, me imagino que no les intereso mucho, ya que me dejaron aquí siendo un bebe, soy el mayor por lo tanto me toca trabajar para ayudar con el orfanato, aunque trabajar no es suficiente en esta sociedad para poder vivir, por lo tanto me toca hacer mas que eso.
—Salgo con la frente en alto—en esta sociedad los que no tenemos linajes somos considerados basura, por lo tanto nos tratan como tal ya que nos asignan los peores trabajos, yo tengo que trabajar como una mula todos los días por el orfanato. Comienzo con un restaurante necesitan ayuda en la cocina por las mañanas así que de eso me encargo yo.
—Entro al restaurante y la encarga me dice:
—Oye llegas tarde Ken—dice ella enojada —
—Perdón me retrase un poco—dijo Ken apurado
Ah si mi nombre es Ken y ahora estoy sirviendo las mesas ya que todavía no llega la mesera.
Entra corriendo una chica y me tropiezo con ella mientras cargo una bandeja con un plato de sopa, haciendome derramar la sopa sobre ella.
—awww hola Ken—dijo ella mientras se quitaba la sopa de la cara
Levanto el desastre y extiendo mi mano y digo:
— Hola Silvia
—De repente la encarga grita— ¡¿oye Silvia que paso?!
—Perdón me quede dormida y me vine corriendo y sin querer tropeze con Ken– responde Silvia exaltada –
—Baja la cabeza y grita—¡Lo siento mucho!
Ella es Silvia mi amiga de la infancia es un poco torpe y siempre anda metiéndose en problemas por su credulidad, la conozco desde que ella vivía en el orfanato, ella fue adoptada por una familia humilde, lamentablemente su padre murió trabajando en las minas de Leí, un mineral raro que se origino durante la guerra, las naves de los Leiren (como se le llamo a los extraterrestres invasores)expulsaron este mineral y se incrusto en nuestro planeta desde entonces lo utilizamos pues resulta que es algo vital para los viajes espaciales y todas las armas de los que tienen linajes.
Recuerdan que les dije que a los que no tenían linaje les tocaba los trabajos mas duros, pues a esto me refería hay minas por todo el mundo y en ellos miles de personas trabajan para extraer este mineral no muchos sobreviven ya que, durante la guerra se usaron armas nucleares por lo tanto estas minas están llenas de radiación.
—La encargada estaba limpiando el desastre hecho por Silvia y decia—cielos siempre es lo mismo, por que no puedes tener mas cuidado.
—Perdón señora — Se disculpa otra vez Silvia —
—En fin, ken gracias por la ayuda de hoy, ten este dinero— la encargada le entrega unas monedas—
Gracias señora, me tengo que ir adiós —sale corriendo ken—
—Oye espera no quieres...— Ken se fue antes de que pudiera terminar la frase y replico.—Cielos ese niño nunca se cansa, de donde sacara tantas energías— dice la encargada—
Tengo muchos trabajos de cocinero, sastre, herrero, carguero, ayudante de contador, bibliotecario, guardia nocturno de bares y hoteles, etc. Todos estos trabajos ayudan al orfanato por lo tanto no me interesa el trabajo duro.
llego al orfanato muy tarde en la noche— mientrasabria la puerta bostezaba y me decia a mi mismo:
—Estoy muerto, el bar estaba lleno hoy.
—¿Ah? ¿Eres tu ken? pregunta Tom
—Hola Tom ¿que haces que no estas dormido?—dije yo mientras cerraba la puerta.
—Tuve una pesadilla otra vez—respondió Tom mientras tiernamente abrazaba a su conejo de peluche–
—En serio ¿que soñaste?—dije mientras me acercaba a el.
—Soñé que me llevaban a las minas y que nunco los volvia a ver —dijo tom con un tono asustado-
—Tom descuida para eso estoy aquí, no permitiré que nadie sea llevado allá.—dije mientras colocaba mi mano en su hombro.
—Lo prometes—dijo Tom dudoso
—Por supuesto, nunca dejare que le pase algo a mi familia—dije yo mientras sonreia
—Que bien —muy contento el pequeño niño feliz me dio un abrazo.
—Bueno, ya es hora de que te vayas a dormir—dije yo mientras señalaba su habitación
—Ok—dijo mientras asentía con la cabeza.
Después de arropar a Tom me puse a pensar sobre las minas, debido al alto porcentaje de muertes, el gobierno obliga a las personas a ir a las minas, hasta a veces les pagan a los padres pobres para que envíen a sus hijo a trabajar en las minas. Mi orfanato no es la excepción, muchos de mis compañeros fueron y nunca regresaron.
Al día siguiente, me fui temprano como siempre, de camino al restaurante me encontré con un alboroto:
—¡Maldito pervertido, que hacías siguiendo a mi hija! —dijo una señora enfurecida—.
—Su hija y yo somos como Romeo y Julieta,sólo que ella no sabe que soy su romeo— respondió el joven de forma relajada.
—Serás altanero, ¡mi hija jamás se relacionaría con alguien de tu clase! — respondió la madre disgustada—.
—Señora los tipos como yo solo se ven cada cien años y su hija sabe eso —dijo el joven—.
—Suficiente ¡guardias! —gritó la señora—.
La señora llamó a unos guardias( una especie de policía que se encarga de mantener la "basura" a raya), ellos se acercaban y mientras iban pasando por unas escaleras, yo les lanzo un saco de harina para despistarlos y le dije al joven:
Por aquí —dije mientras sujetaba al Romeo—.
Salimos corriendo a toda velocidad, los guardias nos siguieron varias calles hasta que nos perdieron, llegamos debajo de un puente y dije:
—¡Qué te pasa Tyler?! — pregunte cansado—.
—Lo lamento, en serio pensé que ella sería la indicada —dijo Tyler con tono relajado—.
—Siempre es la indicada—dije yo mientras me sacudía la frente para quitarme el sudor—.
El es Tyler mi mejor amigo, es del tipo relajado y sin preocupaciones desde pequeño era muy inquieto, debido a eso siempre nos metemos en problemas, se la pasa coqueteando con chicas y casi siempre terminan mal sus relaciones.
De camino al restaurante Tyler decidio acompañame y dije:
—Oye ¿cuantas chicas con linajes te han botado este mes?
—27 al menos—respondió Tyler con cara pensativa —.
—¿Acaso quieres imponer un nuevo récord? —dije molesto—.
—Claro que no, yo solo busco el verdadero amor —respondió Tyler con una sonrisa —
—Sabes que eso es imposibles para ellos no somos mas que basura, que una chica con linaje se interese en nosotros es imposible.
—Hay con esa actitud seguiras virgen para siempre—suspiro Tyler
¡Metete en tus asuntos!— grite avergonzado.
—Llegando al restaurante dije—bueno aquí me quedo y por cierto no llegarás tarde a tu trabajo.
—Ah es cierto Claudia me va regañar, si llego tarde, hasta pronto y una cosa mas no hay nada imposible solo porque nos llamen basura no significa que lo seamos, asi que no te rindas Ken–dijo Tyler mientras se iba apresurado-
¡Nos vemos!
Ese día el restaurante estuvo medio lleno, por lo tanto pude irme temprano a mis otros trabajos, al llegar a casa, en el orfanato vi a unos hombres vestidos de negro hablando con la directora y decian:
—El personal de la mina se reduce, tienen que enviar alguien halla o tendrán que pagar la multa si no pueden pagarla cerraremos el orfanato, tiene hasta mañana para decidir—dijo el hombre de la mina mientrassonreía avariciosamente.
Antes de irse,pude verlos a los ojos y solo vi oscuridad —me acerque a la directora y grite:
—¡¿Que demonios fue eso, acaso cree que somos animales?!— dije enfurecido—.
—Anímeles o no, tenemos que decidirquiénn irá a la mina—respondió la directora consternada—.
—¡Que está diciendo usted sabe que nadie vuelve de ese lugar!
—Al parecer no tenemos opción mira—me acerco la multa.
Cuando vi la multa mi corazón separalizó esa cantidad no la conseguiría, ni siquiera con seis vidas de trabajo duro.
—Lo lamento— dijo la directora mientras inclinaba su cabeza.
Estaba abrumado y mientras me mordía los dientes de rabia, arrugue con mi mano la multa y tome una decisión.
Al día siguiente los hombres vestidos de negro llegaron otra vez, esta vez con suficientes hombres para desalojar el orfanato:
—Y bien ya decidieron que van a hacer- dijo uno de los hombres mientras fumaba un cigarrillo
La directora trajo a Tom frente a los mineros, Tom estaba aterrado pero en ese momento grite:
—Iré yo –todo el mundo volteo a verme.
—Impresionante, un muchacho joven, seguro que quieres desperdiciar tu vida por este mocoso—dijo el hombre mientras soplaba el humo de su cigarrillo en la cara de Tom.
—Claro que si, estos niños son mi familia—respondí firmemente.
—Como quieras, subirlo al camión.
—Un momento si me voy prométeme que no va venir a buscar a más huérfanos del orfanato
El hombre sonrió maliciosamente y dijo:
—Así que tenemos un valiente, las personas como tu no duran, ni un dia en la mina.
—Puede que te sorprenda.
Mire los ojos oscuros del hombre y después de pasar cierto tiempo volvió a sonreír y dijo:
—Bien me has puesto de buen humor, en el raro caso de que no mueras, dejaré de venir a recoger niños.
—Jefe eso es...—dijo uno de los subordinados del hombre.
—¡Cállate! ¡¿Quien te crees que eres para decirme que hacer?!- dijo el furioso
—Perdón.
—Bien recoge tus cosas y vayámonos—dijo el hombre a Ken
Al irme todos los niños del orfanato fueron a despedirme, Tom entre lágrimas dijo:
—Tienes que volver, promételo.
—Si lo prometo.— dije mientras le daba un último abrazo.—
Fue una dura despedida, me subi al camion el cual estaba lleno de otros niños asustados y al llegar a la estación de trenes escuche:
—¡ Ken!— escuche a lo lejos—.
Cuando volteo veo a Silvia y a Tyler y grite:
—¡¿Qué hacen aquí?!— grite mientras me empujaban al vagon
—Lo mismo te pregunto yo, no puedes irte.—dijo mientras estaba sujutaba la cerca de metal
—Tengo que el orfanato está en peligro. — dije asomada en una ventana con barrotes
—Tu sabes bien lo que sucede allí, mi padre…—dijo Silvia llorando intentando saltar la cerca
—Volveré lo prometo, Tyler cuida de ella.
—Sí- dijo Tyler mientras sujetaba a Silvia para que no se lastimara
El silbato del tren sonó y la hora de partir llego asi que dije —Ya me tengo que ir, cuiden a los niños del orfanato, no permitan que nada les falte, volveré lo prometo
Tras decir esto partió el tren y me despedí de mi vida citadina y de mis amigos, en mi corazón sabía que no los volvería a ver, pero no podía permitirme eso y mientras me iba saque mi cabeza por la ventana y grite:
—¡Volveré de eso no hay duda!