Entrevista: TFDC

Influencias de la banda

Luis: Nuestras influencias no son netamente musicales. Vamos desde la poesía hasta de las artes plásticas, creo que hasta de cocina. Hay un montón de referentes que nos inspiran a crear arte -en este caso música: Simón Díaz, Alirio Díaz, algunas de La Vida Bohème, cuando todavía estaban en Venezuela. De afuera, escucho bastante a Bruno Mars y debo confesarles que el trap también me parece interesante. Influencias artísticas: Cruz Diez, Cortázar, Almodóvar. Tenemos una sopa y un montón de artistas que nos influencian y que finalmente nos aportan para hacer lo que hacemos en el proyecto de Teo Fue de Camping. Yo creo que es una propuesta bastante integral porque nosotros no nos vemos solo como hacer música y ya, es un bloque conformado por todo lo que sensorialmente uno puede captar de una imagen, desde lo que se escucha hasta lo que percibes de ese producto (refiriéndonos al término de resultado y no de mercancía) estético, de una búsqueda. Creemos mucho en la diversidad y eso se nota en nuestra música.

¿Por qué Teo Fue de Camping y no a la Oficina?

Luis Sira: Principalmente es un cuento que a mi hermano y a mí, nos leían de pequeños. Teníamos un vicio con ese libro porque nos lo leían todo el tiempo. En realidad el libro se llama Teo Va de Camping y nuestro proyecto tiene parte del libro, pero está en pasado: Teo Fue de Camping, así que no nos pueden demandar jajajaja. La idea de Camping y de Teo yendo hacia él, es esta intención de cuando de repente las personas están en tu vida sumidas a una rutina de trabajo-casa, casa-estudio trabajo y la vida se convierte en esa monotonía, donde te levantas y sientes que has alcanzado algunas cosas y otras no, y el camping es eso, parar la monotonía y decir: me voy a desconectar un momento de esta rutina y me voy a un lugar donde yo disfrute, voy a ver esas cosas simples y disfrutarlas, como de repente las estrellas en la noche, escuchar el mar, las olas. Esa es la idea base de Teo Fue de Camping, hay tantas cosas maravillosas que te estás perdiendo quedándote en otras más enrolladas.

¿Cómo logran compactar los géneros musicales? En la canción Huesos, hay una notable influencia de country y folk, mientras que en Esta Vez hay un apego hacia el rock y el uso de sintetizadores.

Luis Sira: Sobre la diferencia entre Huesos y Esta Vez, a nosotros nos emociona eso de lograr la versatilidad entre un género y otro. Nos encanta cómo se puede compactar con otro y sobre lo que queremos comunicar. El folk en otro momento también puede decir lo que el tema requiere o lo que nosotros queremos transmitir. Eso de que de pronto parece que vamos hacia el rock and roll y luego antes estábamos en un poco de folk, nos parece que es genial poder, sin perder la esencia de lo que es Teo Fue de Camping, coquetear ahí con otros géneros. No nos limitamos. Creemos en la esencia de lo que hacemos, independientemente, de que la música pueda tomar elementos de uno u otro estilo, está allí y se siente. Podemos plantear algo también orgánico, usar instrumentos acústicos. Está presente el espíritu de lo que es en sí el proyecto de Teo Fue de Camping.

¿Cómo es el proceso de composición en Teo Fue de Camping?

Luis Sira: Sobre el proceso de composición, yo lo comparo como un juego, nunca me he tenido que enfrentar a una presión. Siempre ha sido muy libre. Agarro la guitarra, el teclado o de pronto hasta el xilófono y como con una percusión de base que la traigo de la calle, porque de pronto escuché en el metro una gente peleando en la puerta para entrar, un sonido repetitivo me puede dar una idea. Las ideas base, vienen de afuera, en algún momento de la calle o de la casa. Eso me lo traigo y de repente le doy tonos y sí es verdad, la música me va diciendo de qué va o sobre de qué se trata la canción. Al final todos nos involucramos y decidimos cosas, sí hay pedazos individuales y mi parte es la letra de las canciones y hacer una base que contenga esa letra. Y esa melodía que vino de la calle, vino por unos golpes extraños que sonaban armoniosos, me los traigo para la casa, les doy tono y me van diciendo qué letra necesitan ellos. La música me dice de alguna forma: mira, yo necesito decir esto.
Mi trabajo es como ser una especie de intérprete. Aaron es el arquitecto de todo; él ve esa idea medio difusa y le coloca orden y parámetros. Lo convierte de esa primera intención que quizá no tiene brazos a una con brazos fuertes con esteorides y termina siendo una propuesta sólida y chévere.

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Redacción: Michelle Rodriguez