El que sale de los lagos dormidos
del verde translúcido
El agua se convierte en pantano y hojas grises.
Pero aún todo está allí
Como lo habíamos imaginado
Los ofendimos, los asustamos
Tocando nuestros sentidos, el que tanto hemos temido.
Helado y calmado,
Nos dejamos llevar
En el que solo puede besarnos,
Para estrangularnos mejor.
Lágrimas en nuestras mejillas
Privilegio de aquellos que aún no se han hundido.