He decidido que voy a hablar de mis discos preferidos aquí, tampoco es una decisión muy firme, esto puede evolucionar a "voy a hablar de mis películas" o de mis libros o de mis piedras favoritas.
Si te gusta el jazz seguramente te gustarán muchos discos de jazz, si te gusta el rap seguro que la lista de discos favoritos es casi igual de larga. Yo de lo que voy a hablar aquí es de discos que me han cambiado la concepción que tenía de un determinado estilo de música. Esos discos que al escucharlos por primera vez te preguntas ¿y esto qué es? ¿Esto cómo lo encasillo yo? ¿Pero esta mezcla resulta que se puede hacer y que además queda bien? ¿Esto en qué sección de la tienda de discos lo busco? (cuando había tiendas de discos)".
Discos que me han roto los esquemas, las ideas preconcebidas, los prejuicios, los principios y casi la vida entera. Creo que la lista va a ser larga. Voy a ir uno por uno para no aburrir mucho y me voy a centrar en una canción porque todos los discos nos llaman la atención por una canción en concreto (que luego a lo mejor ni siquiera es la que más te gusta del disco, has tenido tiempo de descubrir otra que te gusta más) pero me voy a centrar en la que me llamó a mí de cada uno de los discos, la canción que me dijo en su día "¡eh moreno! ¿Dónde vas? Quédate aquí un ratico que esto es un discazo que vale la pena y como te descuides te lo pierdes".
Voy a empezar por "El Niño" de Rocío Márquez, porque ha sido el último que me movió las conexiones neuronales entre otras muchas razones, concretamente por "El Venadito"; aclarado entre paréntesis en el disco que se trata de una colombiana. A mí me gustan las colombianas, me refiero al palo flamenco, bueno, no me voy a meter en jardines ya en la primera entrada de la saga.
Cuando escuché "El Venadito" me acordé de la letra de "Soy un pobre granaíno" que yo había conocido en la versión de Los Planetas (soy muy partidario de Los Planetas en general y de su ramalazo flamenco en particular) pero en este caso se trataba de un pobre venadito en lugar de un pobre granaíno.
Arranca con un coro de niños, luego empieza a cantar otra chica y en ese momento entra un acompañamiento instrumental sutil que parece de Deep Forest con un toque de flauta casi celta, y un poco después Rocío con una dulzura y una fuerza que emociona al tacto superponiendo el mismo verso pero con un poco de retraso. Y llega el estribillo con el coro de nuevo; yo al principio me fijaba en la voz de Rocío, en el coro, en la otra chica y entonces a la tercera o cuarta escucha me di cuenta y pensé "han metido un ritmo de drum and bass, qué cabrones, han metido ahí su drum and bass y me lo he tragado sin enterarme, no chirría en ningún momento, no se me ha hecho raro". El tema sigue fundiendo coros, segundas voces, la voz preciosa de Rocío vuelve a entrar repitiendo la estrofa con un poco de retraso y en lugar del teclado aparece una guitarra eléctrica (y un bajo tal vez), en este guitarrazo, en la forma de acabarlo justo antes de que la voz llegue al momento cumbre para acentuar la emoción, ese toque tan efectivo y que tan bien había funcionado en el disco "granada" pensé que eso era muy característico de Refree y efectivamente, este tema está producido por Refree. Y luego un punteo y un charango y más coros, es una locura maravillosa.
Todo esto pasa en una única canción. Una canción de un disco de flamenco, en la voz de una cantaora, "flamencautora" porque también firma algunas de las letras de sus otros discos y compone y es capaz de lograr que la unión de todos estos elementos no rechine y suene fresco, el resultado es deslumbrante y muy adictivo. ¿Hay alguien que haya escuchado esta canción una única vez y no le hayan quedado ganas de volverla a escuchar?
"El Niño" tiene muchas otras joyas y "Firmamento" tiene otras tantas, Rocío es una joya en sí misma.
:) se te echaba de menos por estos lares...!
Downvoting a post can decrease pending rewards and make it less visible. Common reasons:
Submit