La música me apasiona mas que a nada, siempre lo supe, desde que era pequeño siempre quise un guitarra, recuerdo mi infancia pidiendo a mi madre cada fecha festiva una guitarra, aunque sin embargo pasaron los años y supongo que no recibió bien el mensaje porque lo único que recibí fue un cuatro, a la edad de 15 años trabaje muy duro para comprarme mi primera guitarra, y si, tenia nombre, "camila" parece ridículo en cierto modo, pero es un recuerdo que atesoro con mucho valor, no fue la mejor guitarra, no tenia ninguna marca, pero era mía, aproveche cada instante que estuvo conmigo, practicaba sin parar, en el liceo las personas solían decirme camila, no se si por el parecido en la voz o porque cantaba mucho sus canciones, pero algo es seguro, siempre estuve seguro de cual era el genero musical por el cual yo seguiría mi camino y son las baladas las que penetraban mi alma como como flechas ardientes de cupido, el ultimo año de el liceo conocí un nuevo instrumento, nunca imagine que me interesaría en el, el violín cantaba lo que mi corazón sentía, a partir de allí sabia que jamas dejaría de hacer música.

Decidí estudiar educación mención música, no porqué me interesara la educación, si no porque quería saber mas sobre la música, intente entrar a conservatorios pero ya tenia la edad de 17 años, en ninguno me aceptaron porque dijeron que ya era muy tarde para aprender, aunque tampoco se tomaron la molestia de escucharme tocar, sin importar nada de eso seguí avanzando en mis estudios musicales, conocí el amor verdadero y de allí partieron innumerables canciones, canciones que atesoro mas que a mi propia vida, en el año 2017 entre a una banda llamada "I-CORE" allí grabamos uno de mis temas aunque nunca fue lo que yo quise, les mostré la letra y les gusto pero el genero lo modificaron completamente, de una balada paso a algo que llamamos "llarengueton", de igual forma acepte, no tenia los recursos para gravar una canción y menos en la situación en la que nos encontrábamos lo venezolanos en aquel entonces, era la única oportunidad que tenia, aunque no fue lo que esperaba disfrute al máximo cada momento junto a ellos.

La situación en Venezuela empeoro para todos y como banda llegaron días en los que no teníamos toques y tuvimos que tomar la decisión de aventurarnos en el exterior, la mayoría de los integrantes de la banda se fueron a Perú con la esperanza de poder mejorar su situación económica y poder allí seguir el proyecto ya establecido en Venezuela, yo aun no había terminado mis estudios y no podía dejarlos en el 7mo semestre así que decidí quedarme con la esperanza de que mientras pasara el tiempo sacar mi pasaporte, aunque paso el tiempo y no supe mucho de los integrantes de la agrupación, solo se que el proyecto como yo se quedo aquí.

Sin importar cuantas veces me caiga, me levantare, por mi y para desmostar de que estoy hecho, no solo yo, hablo de esos mucho Venezolanos que como yo sueñan en grande y saben que somos luz en tinieblas, que somos imparables, que tenemos mucho que dar y queremos ser escuchados, que queremos ser infinitos y recordados.