Las razones son muchas… bueno, no tantas. Se me enfermó la abuela y el estar lejos mata, la lejanía es una herida que sangra constantemente. Definitivamente yo no aconsejo la inmigración, porque siempre dolerá la familia y los amigos siempre se extrañan.

Qué no daría yo ahora por estas con una amiga conversando de todo.

Y otra razón es mi estado de nervios, he decidido hacerme autónoma, eso significa declarar lo ingresado al estado. Lo hago principalmente porque tengo que justificar que tengo ingresos para traer a mis padres más adelante, ellos no quieren, pero a la larga será lo mejor.

Pero me vienen mis contradicciones ¿Qué hago aquí?¿Y porqué no me vuelvo a casa? y mis miedos, muchos miedos ya que tengo la sensación extraña de que me quieren enterrar un cuchillo por la espalda… naturaleza humana, dicen. Y cada vez más sola sigo mis andaduras por las criptomonedas, un poco corruptas por mercados nuevos y steemit, donde se pueden “comprar”votos. Díganme ingenua, pero no pensé que eso se aceptara… era de las que creía en lo auténtico. Pero hoy me enteré que no, hay quienes abusan de su poder y votan contenido sin revisarlo… que pena. Naturaleza humana, dicen.

Tengo el día malo, el triste… y con pocas ganas y escribo, bueno… escribo porque nadie me lee, es lo que tiene no comprar votos.