
No es amor, ni mucho menos política, es la fantasía en sí misma, hecha de ciegos adeptos que nunca creyeron la mentirosa certeza que sus ojos se negaban a aceptar, religión en estado puro, aficionados del extremismo espiritual y defensores de instituciones protegidas por la simpatía y empatía que causaban a la sociedad, pero que en el fondo no eran más que la personificación del mal.
No existe rencor ni odio, solo un ligero sentido de la justicia que se regocija en su caída, en como ese cuarto oscuro fue iluminado y quemó hasta al más oscuro, misma luz que abrió los ojos de todos, despertando finalmente una pizca de criterio propio y una cucharada de sentido común.
Downvoting a post can decrease pending rewards and make it less visible. Common reasons:
Submit