Tengo Lupus y no hago trucos para ser feliz

No hay secretos en mí manera de llevar mí vida, solo hay disposición y decisión de ser feliz. No solo sobrellevo una condición inmunológica sino varias, y todos los días decido pararme y ser feliz, cada cosa la disfruto al máximo! No desperdicio absolutamente nada. Todo lo aprovecho, reciclo, invento y amo con toda mí intensidad, entrego sin egoísmo y enseño todo lo que se. No me guardo nada porque el tiempo no perdona y de nada sirve dejar cosas deterioradas cuando ahorita me sirven a mi y le sirven a otros.

Lo más difícil a nivel de emociones me ha tocado vivir es la independencia emocional, mis apegos enfrascados en la sobreprotección y el sentimiento exagerado de que si no cuido con mis propias manos algo o alguien...pues no sobreviviría (absurdo! Lo sé) esto me ha llevado a cometer disparates, desaciertos que me han costado un mundo devolver a su forma original, sobreponer una condición original después que me encargue de enviciarla en la complacencia no ha sido una faena fácil de llevar a cabo, pero todo tiene un punto de inflexión...ese que sucede cuando te das cuenta que ni siquiera tus propios temores son capaces de tiritar tu vida. Darme cuenta que tenía una gran responsabilidad encima y que la difería constantemente y me subordinaba ante mis propias necesidades fue lo que hizo que algo ensordeciera mi ritmo y me arrastrara a una profunda introspección que dio paso a un empoderamiento y de ahí la elucubración que permitió que existiera brete: de oruga a mariposa!

Encontrarme a mí misma no fue ligero ni fluido, fue huracanado, nublado y de poco oxígeno emocional, esto aperturo una abstinencia en donde la individualidad dolía en los huesos, en el alma y en el corazón, representaba morir pensando que me había expuesto al abandono y al olvido y a su vez representaba nacer en libertad! Donde no había más naufragio después de cada tormenta! Donde no había miedo a no reaccionar frente a cada extreno o cada historia nueva en la cual yo ya no tenía control... Señores esto se llama vida! Se llama libre albedrío, autonomía, emancipación, es una liberación única y sanadora, donde tu cabeza se ajusta donde debe ser, y surgen las ideas productivas y gloriosas...es lo más cercano a ese boom que esperamos toda la vida, y que solo se reconoce cuando estás verdaderamente acoplado y compaginado con tu verdadero motivo de ser y existir!