Feliz día atrasado amada mía ...

Ten la certeza que siempre estaré contigo… te amo inmenso … gracias por quitarme el chicle de mi axila mientras dormía cuando era niño … Pequeños fragmentos de una carta que te escribí hace como ocho años, quien diría que en el futuro iba no solo a decirlo sino también a cumplirlo.

No sé cuántas veces te he vistos en mis sueños, a veces estas más enferma que nunca y otras como si no existiera nuestra historia de pena, dolor y sobre todo de profundo amor.

Justamente hoy amaneció y no te vi en mis sueños, por un momento pensé que mi mente me echaría una mano y me complacería con verte en tu día, que al final es nuestro.

El día pasaba y mi mente un poco más solidaria te imagino a mi lado mientras esperaba el transporte, sentía que el aire lleno de tu olor acariciaba mi tez, respire profundo, cerré los ojos y de repente te encontré ahí, rellenando la huella que dejaste en mi vida, te abrace y esta vez te sentí decir que siempre estarás conmigo y que me amas inmenso. Yo aun con los ojos cerrados llore bajito, luego los abri y le pedí al chofer que me dejara en la parada y dentro de mi dije “feliz día Miriam”

Tu huella queda en mi como una mancha de acero, siempre voy a sentir tu presente ausencia en todos mis espacios, te amo madre mía .

Saludos...