Saludos a todos mi nombre es Abraham Rodríguez, soy costarricense y periodista y les quiero comentar que el Explorador fue parte importante de mi vida durante los casi 13 años en que me desempeñé como reportero y productor en un importante canal de televisión en mi país, una de las cadenas televisivas abiertas más importantes de Costa Rica. Fue sin duda de las experiencias más maravillosas de mi vida; y que me permitió conocer cada rincón prácticamente centímetro a centímetro de mi precioso país.

Fui testigo y viví de las historias más maravillosas y sorprendentes. Conocí y aprendí de las personas más increíbles de nuestro territorio nacional, desde el presidente de la República  hasta el más humilde  de los labriegos sencillos.

El Explorador me llevó a conocer el propio lugar donde la tradición asegura nació Jesucristo, caminé siguiendo sus pasos hasta llegar a su propia tumba. El Explorador fue pasaporte para conocer al menos una decena más de países y culturas. Fui a un Mundial de Fútbol en Corea y Japón.

Logré a nivel profesional éxitos como un premio Nacional de Periodismo de Género y un galardón centroamericano de producción de video ecológico.

El Explorador todo me lo dio y sin pedirle yo nada a cambio.

La vida te marca ciclos y llegó el momento de separarnos. Yo tomé mi rumbo fuera de las televisoras tradicionales y El Explorador se quedó por gracia y respeto al canal en un baúl del recuerdo. El sombrero, chaleco, el pantalón y las botas de viaje hicieron un alto indefinido en el camino .

No podría explicar el dolor cuando caminé la última vez por los pasillos de mi televisora, sabiendo que dejaba atrás grandes amigos y a mi querido Explorador, guardado en aquel baúl junto a su típica indumentaria y a un cúmulo de 600 reportajes llenos de maravillosas historias.

Pasaron los años

Casi una década ha pasado desde el día de la "separación" pero a lo largo de los años algo curioso me ha sucedido y es que aún recientemente me encuentro con personas que me hablan de los reportajes que hice hace muchos años pero hablan de ellos como si se hubieran emitido el día de ayer.

Me encontré señoras que decían categóricamente que extrañaban al Explorador, otros que ni siquiera se acordaban de mi nombre pero si del seudónimo y que relataban que gracias a ese personaje lograron conocer Costa Rica. Inclusive viví la maravillosa experiencia en el Pacífico Central, en Herradura, con un muchacho de unos 17 años que me abordó en una heladería y me dijo que su papá reunía a toda la familia a ver el noticiario de canal 6 por la noche para que juntos vieran la sección del Explorador.

Volver volver

Ese gusanillo periodístico siempre queda y por estas anécdotas que acabo de relatar y algo que sucedió hace unos años, y que hasta ahora determiné como una señal, decidí pedirles a mis amigos de Repretel un buen grupo de reportajes para revivir al Explorador. Conté con el apoyo de Don Fernando Contreras y de Doña Roxana Zúñiga y aquí estoy tratando de iniciar una nueva etapa, más pausada, más madura del Explorador.

Mi objetivo es recordar viejas aventuras y tratar de aportar algunas nuevas. Es un viaje hermoso que quiero iniciar sin presión para disfrutarlo de forma relajada, así que espero que me acompañe a seguir conociendo.

Secretos del Explorador

Pocas veces he contado los secretos de este personaje pero creo que este es el espacio y que llegó el momento.

La receta

• El Explorador sería una sección ambiental, de turismo no tradicional y que recogería historias del ser costarricense en toda su dimensión.

• El Explorador llevaría a los costarricenses a lugares poco conocidos, NO tradicionales, difíciles de accesar, o si iba a un sitio tradicional debía buscar algo diferente a cualquier cosa que su hubiera dicho del sitio.

• El Explorador tendría licencia literaria para escribir los guiones y podía romper los esquemas de la escritura periodística tradicional y formal pero manteniendo los principios básicos del periodismo.

• El Explorador no era un periodista con nombre, era solo un personaje que sin sobresalir más de lo necesario tenía por objetivo mostrar las maravillas de Costa Rica.

• El Explorador se nutriría de las recomendaciones del propio pueblo y perseguiría las historias y lugares que la gente de Costa Rica creyera relevantes en sus comunidades.

• El Explorador NO sería protagonista de un reportaje más que para darle continuidad al relato y objetividad y credibilidad a la historia.

• El Explorador NO podía hacer más que una presentación en cámara a menos que fuera estrictamente necesaria y NUNCA incluiría su imagen, preguntas o comentarios en una entrevista.

• La televisora  asumiría los costos de las giras y la operación del Explorador para darle autonomía editorial y poder buscar historias nuevas que no persiguieran intereses comerciales.

Esa fue la receta del éxito para esta sección. Ahora que la veo enumerada formalmente, creo poco probable que en la actualidad alguien acepte estas condiciones pero en definitiva son las que destacan una producción de otra, donde el periodista solo es un medio para comunicar un mensaje y no un protagonista del mensaje. Tantos años después me parece una excelente fórmula a aplicar en el periodismo televisivo nacional.

Ya desnudo completamente El Explorador, podemos iniciar esta nueva etapa, esta nueva aventura en steemit para que el mundo conozca Costa Rica y otros lugares a travez de los ojos de un Explorador

**** Texto adaptado de mi página web www.exploradorcr.com