De pronto todo se paraliza a merced de tus suspiros, una milésima de segundo basta para adentrarse en un mundo enteramente nuestro, el alba ya casi muere más sin embargo nos invita a respirar, soñar y vivir... Distante más no taciturno, hablemos permite que tus suaves palabras golpeen con lucidez está desenfrenada sed de escucharte, estás aquí galopante y enérgico ante cada movimiento de mi cuerpo, no tiene nada de raro reencontrarse consigo mismo, ni tiene nada de descabellado trillar una poesía en el sonido del viento.
Solo si pudiera me permitiera volar a lo alto de un rascacielos y viajaría con mi mente a la lejanía, ya no puedo proponer certeramente un comienzo, solo si pudieran las cosas burlar la celebre frase " CUANDO NO ES COMO DEBERÍA SER" me entregaría haciendo caso omiso al dolor que produce callar las lagrimas que mueren en una sonrisa fingida...