Reflexionando

A

menudo en nuestro devenir diario nos vemos totalmente agotados y sin energía, sin embargo, desafiamos la sabiduría de nuestro cuerpo forzándonos a terminar nuestras obligaciones como buenos ciudadanos. Cuando tu cuerpo te dice basta, no hay que exprimir la máquina. Siéntate y descansa. Intenta mirarte desde arriba para verte con perspectiva.

Encadenados y llevados en volandas para conseguir o mantener lo que ahora llaman una vida de éxito.

¿Quién no se ha sentido alguna vez como el tigre de la foto? Mirando la pantalla del pc con la mirada estrábica como quien dice, contemplando el infinito, dejando tu volar tu mente imaginándote haciendo cosas que te proporcionarían mucha más felicidad.

El triunfo

tanto en lo económico como en lo personal es más una cuestión de calidad que de cantidad. Vivimos en un mundo altamente competitivo donde el más mínimo error se paga. Yo propongo, hagamos menos y mejor.

¿Qué preferís? ¿Leer diez párrafos que no te hagan sentir nada cuando los leas? ¿O leer cinco líneas tan poderosas en su contenido que te hagan reflexionar y te pongan los ojos vidriosos?

La Mediocridad

es una de las plagas de nuestro tiempo. Viene ligada a la comodidad. Cuando uno se acomoda, te vuelves mediocre.

¿Te dedicas a la construcción? Pon cada ladrillo como si te fuera la vida en ello.

¿Eres profesor? Trata a tus alumnos con la ternura y delicadeza como si estuvieras hablándole a tu hijo.

¿Eres escritor? Piensa cada frase que escribas mil veces. Hay que hacer sentir. Da igual qué tipo de sentimiento generes, emoción, tristeza, alegría, admiración o empatía.

Steemit aún es un bebé. En un futuro donde haya millones de hispano hablantes creando contenido, solo los verdaderamente buenos, solo los que hagan sentir a sus seguidores e innoven serán los elegidos.

La masa encumbrará el contenido de calidad.

Imágenes Pixabay