Ciertamente Venezuela posee ciudades, pueblos, caseríos y aldeas muy especiales y dignas de conocer; en estas mis vacaciones veraniegas tuve la fantástica oportunidad de hacer un poco de turismo en este asombroso pueblito anclado en el mero corazón de Venezuela.
   Les invito a que junto conmigo descubran lo fascinante de esta región recóndita del mundo mis queridos Steemians.

(Iglesia Católica "Santa Lucía". Ubicada en el caso central de Yaritagua)
   Es Yaritagua, el poblado del Estado Yaracuy fronterizo con el Estado Lara; ubicado en la región centro-occidental del país.
   Te sorprendería saber que existe un pueblito tan pequeño pero a la vez tan rico en cultura, en costumbres y tradiciones excepcionales. Allí disfruté de su gente, de su música, de su historia, gastronomía, arquitectura y lindos paisajes por demás.
   El casco central del pueblo posee una arquitectura colonial y muy pintoresca; sus calles son angostas con aceras muy altas en su mayoría. las casas tratan de mantener su belleza y colorido artístico propio de la época de la colonia, como si ayer mismo hubiesen llegado los españoles a conquistar nuestras tierras.

   Las personas se dedican a la siembra y cosecha de algunos rubros importantes como la caña de azúcar, granos varios, maíz, frutas, entre otros y a la cría de ganado vacuno, porcino y la avicultura. Es una tierra rica para la siembra de muchísimos rubros.
   El clima es muy agradable, todos los días sale el sol para buenos y malos; eso le hace un pueblo de oportunidades; existen diversas empresas del sector industrial y por estar ubicada tan estratégicamente en la zona más centro-occidental del país, eso le hace un lugar muy especial para el comercio de cualquier índole.

(Alcaldía de Yaritagua- Municipio Peña)

    Sin duda alguna, lo mejor de Yaritagua es su gente, personas sencilla, cálidas, sonrientes, llenas de esperanzas y sueños. Allí nadie moriría de hambre porque todos saben sembrar, allí todos se conocen y se dicen "primo" aunque no sean familia; todos tienen la capacidad de pedir favores sabiendo que nadie negará nada porque son solidarios y muy buenas personas; "en Yaritagua se regalan sonrisas".
   Realmente me quedé prendada del gentilicio Yaritagueño, tanto que ya les extraño; extraño ver las tertulias en las noches de los vecinos en los suburbios, extraño pasear por la plaza y escuchar a los músicos abuelitos tocar el cuatro y cantar a todo pulmón, extraño el saludo amable de todo el que te ve y cree conocerte hasta la tercera generación que te antecede; Yaritagua es excepcional.

(Plaza Bolívar de Yaritagua- Epicentro de tantas emociones)

   Yo soy venezolana, nacida en Barquisimeto Estado Lara, pero al nacer mis padres compraron una casa en Yaritagua, a 10 minutos de la capital Larense. Por lo cual hice mis primeros estudios en este pequeño pueblo, pero mi mayor formación académica y profesional la forjé en Barquisimeto y ahora en Caracas. Esto lo digo porque a pesar de que tengo tantos años lejos de la cotidianidad de Yaritagua, mi corazón se llenó de recuerdos gratos y añoranzas a los buenos viejos tiempos vividos en este pequeño pero hermoso pueblo.

   Aquí deseo mostrarles algunas y pocas fotografías que pude capturar en mis vacaciones veraniegas. No me esforcé mucho en tomar fotografías, traté mas bien de vivir cada momento al máximo y a plenitud para llevarlo en mi memoria.

	Frente a la Plaza Bolívar me vine a comer el helado más sabroso y más económico de mi vida. Equivalente a 1$ esta belleza de helado

	Como siempre con mis acompañantes favoritos, mis pequeños hijos

   Nuestro paseo por una pequeña pero extraordinaria heladería en el corazón de Yaritagua. Los helados más económicos y sabrosos de mi vida.

	Pabellón criollo: Entre tantas cosas ricas que pude comer, esta el excelentísimo Pabellón. Compuesto de: Arroz, carne esmechada, caraotas, plátanos maduros fritos, huevo. Una delicia sin igual.

   Un pueblo digno de conocer, lleno de personas dignas y agradecidas con la vida por vivir allí. Allí residen múltiples culturas en un pequeño radio de acción; por ejemplo: está el portugués de la panadería, el italiano de la zapatería, el árabe de la tienda de ropa, el español dueño de los inmuebles del comercio, el chino del abasto y el restaurante, el colombiano de la quincallería, entre otros, mezclados hermosamente con los nativos criollos que hacen vida en el campo de trabajo. Es una mezcla electrizante, un sentimiento digno de vivir .

   Aquí le dedico una canción al río que surte buena parte del Estado Yaracuy, el río Yurubí: