La civilización maya se caracterizó por ser un pueblo indígena que vivió mayormente en ambientes hostiles como en la selva tropical en Centroamérica donde ciertos recursos naturales eran escasos. Sin embargo, esto no fue un impedimento para su desarrollo cultural en Mesoamérica. 

Con el pasar de los siglos, esta civilización realizó grandes aportes y hallazgos que aún están presentes en la actualidad como la creación del Templo de Kukulcán en Yucatán.   

    

Al igual que otras civilizaciones, el declive del pueblo Maya fue inevitable. Entonces, ¿Qué se puede decir sobre su inicio, apogeo y caída?

 

ORIGEN Y FLORECIMIENTO DE LA CIVILIZACION MAYA

Se estima que su inicio fue en el año 1.000 a.c. La historia de la civilización maya se divide en tres periodos principales: el Preclásico, el Clásico y el Posclásico. 

El periodo preclásico inició entre el año 1.000 y 1.800 a.c. En ese periodo, los mayas llevaron a cabo sus primeros asentamientos sedentarios en el noreste de México, las tierras altas de Guatemala, el norte de Petén (Guatemala) y Belice. 

Esta etapa se caracterizó por las contribuciones en la arquitectura, la pintura, la cerámica, la escritura, las figurillas de barro cocido y la agricultura.

Por otra parte, hubo varias ciudades con gran influencia política como Nakbé, por haber sido considerada una de las más antiguas en las tierras bajas mayas. Otras ciudades importantes en esta era preclásica fue la ciudad de Teotihuacán (México). 

El declive en esta era preclásica se llevó a cabo tiempo después, en el siglo I d.c., donde los mayas abandonaron las ciudades por causas desconocidas.

   

                        Avenida de la Muerte, Teotihuacan (fuente)

Periodo clásico de los Mayas

En este periodo clásico, los mayas se caracterizaron por su desarrollo intelectual, artístico y sus construcciones arquitectónicas a gran escala, principalmente en las tierras bajas del sur de Mesoamérica. 

Eran grandes metrópolis que se conectaban a ciudades anexas mediante redes de alianzas y enemistades. Entre esas ciudades destacó la ciudad de Teotihuacán, México.

En el año 378 de nuestra era, Teotihuacán impuso su poder sobre la ciudad de Tikal en donde instaló su dinastía y anexó a otras ciudades como aliados. 

Después de que ambas ciudades convergieran en una serie de enfrentamientos entre dinastías y la toma del poder, Tikal terminó convirtiéndose en una de las ciudades más poderosa de las tierras bajas y centrales en el antiguo México. El rey de Tikal, Chak Tok Ich'aak I, fue quien dominó estas tierras durante varios años.

No obstante, la ciudad de Calakmul, ubicada en la cuenca de Petén, era otra ciudad rival de Tikal. Estas dos ciudades se determinaron por la creación de sus sistemas propios de vasallos y sus continuos enfrentamientos durante la era clásica. 

Como ejemplo de lo mencionado fue la batalla cuando el Rey, Yuknoom Ch'een II de Calakmul, derrotó y conquistó a la ciudad de Dos Pilas (Norte de Guatemala) en 648 d.c.

Otro aspecto resaltante en el periodo clásico de la civilización maya fue el autoritarismo impuesto por los gobernantes de las diferentes regiones a sus habitantes. 

Esto ocurrió en el siglo IV y V de nuestra era, cuando los líderes en las ciudades principales intensificaron la explotación de la población a través de las actividades comerciales, construcciones, guerras y rituales. 

Esto trajo como consecuencia respuestas renuentes de sus habitantes donde hubo levantamientos como en el norte de la Península de Yucatán, Chichén Itzá y Uxmal (México). Seguidamente, su gente terminó movilizándose a otras ciudades. 

    

                              Pirámide Maya en Uxmal, México (fuente)

En cuestión de pocas décadas, estas ciudades fueron abandonadas debido a causas desconocidas.

No obstante, se puede considerar la sequía y la degradación del medio ambiente como un posible factor de este abandono. Algunas de estas ciudades que fueron abandonadas estaban ubicadas en el sur de Yucatán (México) y Petén.   

Periodo Posclásico Maya

Finalmente, se encuentra el periodo posclásico (950-1539 d.c.) en el cual ya habían ocurrido muchas movilizaciones de los habitantes de la mayoría de las ciudades mayas a otras tierras. Esto se sucedió en sitios donde hubo fuentes de agua viables, como en las tierras bajas del norte y las tierras altas.

La característica más resaltante de este periodo fue la forma de gobierno en conjunto donde había un líder y un grupo de asesores como en la ciudad de Yucatán, El Reino Quiché y las tierras altas de Guatemala. 

Sin embargo, esto no fue excusa para los continuos enfrentamientos entre ciudades, principalmente por el control político y las divergencias en la forma de gobernar.

CAÍDA DEL IMPERIO MAYA

En esa misma era posclásica, varias de las ciudades mayas aún mantenían su apogeo como Yucatán, Tabasco, Potonchán, Tenochtitlán y el reino quiché. 

No obstante, en 1517, los exploradores españoles efectuaron una expedición en las tierras de Yucatán. Los integrantes de la expedición fueron capturados, logrando escapar dos de ellos, a los demás los asesinaron. 

En los años posteriores, se realizaron tres expediciones españolas en Yucatán y Tabasco. La última expedición de los españoles fue en 1519, donde se enfrentaron con los mayas en la conocida Batalla de Centla, en Potonchán.

Años más tarde hubo varios enfrentamientos entre los mayas y los españoles. Por ejemplo, en 1524, el Español Hernán de Cortés envió a Pedro de Alvarado a conquistar tierras nuevas lográndolo en una parte del Reino de Quiché. 

Otro enfrentamiento lo protagonizó Francisco de Montejo en la península de Yucatán en 1546. Luego, en 1567, Martín de Urzúa lanzó su último ataque a la ciudad Itzá provocando la caída de la única ciudad maya autónoma para ese entonces.  

A pesar de los cambios drásticos que vivieron esos pueblos tales como: continuas movilizaciones a otras ciudades y los enfrentamientos internos, un puñado minoritario de sus ciudades se mantuvo al margen del dominio español. 

Más allá de lo que se conoce de los mayas, la desaparición de su población — casi en su totalidad — pudo ser por diferentes razones: escasez de alimentos, tala y quema excesiva, enfermedades o las guerras.

   

(fuente)

El desconocimiento de las causas de la caída de esta interesante civilización ha provocado debates por parte de los investigadores, arqueólogos y estudiosos a lo largo de los años.

Lo que sí está claro es que sus investigaciones continúan vigentes. La historia, la cultura y el aporte de los mayas seguirán emergiendo con el tiempo, pues forman parte de la reliquia cultural de Centroamérica que los vinculan al resto de los latinos y la humanidad.

Nos vemos en la siguiente entrega de esta mini-serie con más detalles sobre el legado de los Mayas…. 

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