Un Adán pícaro y tentador

_{Adán y Eva, de Hans Baldung. Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid}

Este cuadro del pintor renacentista Hans Baldung es una de mis obras favoritos del museo Thyssen. Se encuentra en la sala 9a, dedicada a la pintura alemana de los siglos XV y XVI. Es un óleo sobre tabla alargado, de 147 x 67 cm, compuesto hacia 1531.

Llamó, desde el principio, mi atención por esa actitud sensual y provocativa de Adán, que toca uno de los pechos de Eva con la mano mientras se abraza a ella por detrás con la mirada fija en nosotros. Me parece un cuadro lleno de erotismo que se aleja del tratamiento habitual del tema. Hace que me pregunte quién es el verdadero demonio tentador, si la serpiente, representada ahí al lado, o ese Adán de ojos provocativos. Si hasta los caracolillos de los rizos casi semejan unos pequeños cuernos.

Aunque Hans Baldung Grien fue discípulo de Durero, puede verse la gran diferencia que hay entre el tratamiento del tema en este cuadro y el que hace su maestro en las dos tablas de Adán y Eva que hay en el Prado (obras, por otro lado, sublimes del pintor alemán).

Para saber más sobre esta fantástica pintura, podéis pasaros por la web del museo Thyssen-Bornemisza, donde se puede admirar la obra en alta resolución.

@iaberius

Este artículo lo publiqué primero en mi blog Gabinete de curiosidades. Para que no haya dudas de mi autoría.