“Dime como me mides y te diré como me comporto” -- Eliyahu M. Goldratt
Se preferir, leia em português.
He publicado por aquí sobre determinados temas de mi gama de intereses y que, al parecer, algunos de ustedes han encontrado convenientes o provechosos al punto de decidir "seguirme". Así que podría darme cuenta de que cuando publico sobre, digamos, criptomonedas, aumente mi número de seguidores, me gusta, y tal.
Pero ¿qué pasaría si de repente publicara más sobre asuntos que no coinciden con los gustos y hasta opiniones de mis seguidores? Por poner un ejemplo, tengo simpatía por anuros (sapos, pererecas, ranas); me gusta que visiten mi casa y en general no me molesta su cohabitación. Lo que probablemente sucedería si publicara sobre sapos, es que perdería a seguidores. Entonces, de cierta forma, nos quedamos más "atados". No hay dudas de que, si en mi canal enfocado en la tecnología en Telegram, publicara una noticia sobre el brócoli (y ya lo he hecho, pero en los canales adecuados, por encontrar relevante para su público) varias personas habrían dejado de seguirme. Pero por allá puedo participar en cuántos canales quiero.
Ya en el Steemit, ¿seremos "prisioneros" de nuestros seguidores, obligados a mantener alguna coherencia con lo que ya publicamos en el pasado? ¿Seremos conscientes o inconscientemente moldeados para no desagradar nuestra red de atención?
Al final y al cabo, para la mayoría, en mayor o menor medida, es eso mismo. Y ese no es un problema de la comunidad, de las personas que aquí participan, pero tal vez una brecha específica de Steemit / Busy. En Telegram, Facebook, Reddit etc, es posible organizarse mejor en canales, grupos, páginas, dirigidas a intereses y públicos específicos. Por aquí, la única organización posible se produce por medio de etiquetas (a veces, demasiado genéricas, como la #spanish), para las cuales ni siquiera existe un mecanismo de suscripción.
Sin embargo, puede existir una ventaja como efecto secundario: la estructura de Steemit "fuerza" al usuario a convivir con puntos de vista diferentes. Justamente Facebook y otras redes son acusadas de formar "ollas", o cámaras de eco, donde las opiniones de los usuarios se refuerzan y, en algunos casos, radicalizan.
"En los medios de comunicación, el término cámara de eco es análogo a una cámara de eco acústica, donde los sonidos reverberan en un envoltorio hueco. Una cámara de eco, también conocida como cámara de eco ideológica, es una descripción metafórica de una situación en que las informaciones, ideas o creencias son amplificadas o reforzadas por la comunicación y la repetición dentro de un sistema definido. Dentro de una cámara de eco, las fuentes oficiales a menudo son incuestionables y opiniones diferentes o concurrentes son censuradas o desautorizadas. La mayoría de los ambientes de cámara de eco dependen de adoctrinamiento y propaganda, a fin de diseminar información, sutil o no, para entorpecer a los que están atrapados en la cámara y evitar que tengan habilidades de pensamiento escéptico necesarias para desacreditar la desinformación obvia. -- Wikipédia
Pero no estoy seguro de que este efecto secundario sea más importante que la "molestia" (el hecho de que no tengamos mejores medios para organizar el contenido aquí) en sí misma, ya que, de una forma u otra, las cámaras de eco también estarán presentes aquí, y además armadas con el poder de la presión económica.
¿Estaría usted dispuesto o dispuesta a "tragar unos cuantos sapos" a cambio de sus recompensas?