Lo que era, pero ya no es.

Soy fiel creyente de que uno no extraña a la persona que ya no está, realmente extrañamos los buenos momentos -Tal vez hasta los malos-, su presencia, el recuerdo de lo que, en sí, fue ésta persona.

Ahora mismo estoy sintiéndome de esta manera. Pero no por un ''alguien'', si no por un algo, mi país.

No específicamente mi país, no soy patriota. Si no las comodidades, personas, LUGARES, que, quedaron en el olvido, sólo porque un grupo quiso porque sí, hacer lo que le viniera en ganas con él.

Antes podía caminar libremente por las calles a las 21:00 sin necesidad de esconderme mi celular, ni mirar siempre a los lados, ni tener miedo de no volver a mi casa. Recuerdo que iba para que mi prima, que es como una hermana, es mi otra mitad y jugábamos en esa plaza, en el barrio donde vivíamos. Y luego a comernos unas arepitas con jamón y quesito con un jugo de guayaba.

Ya no queda nada de esto, NADA. Ni siquiera esa niña, que tanto quiero. ¿Saben por qué? Tuvo que emigrar porque ni siquiera tenía un pan duro para comer...

Hay una inseguridad terrible, salgo por necesidad, porque si no lo hago mi familia muere de hambre.

No sé qué clase de karma estamos pagando...

No dije el nombre del país, pero te imaginaste un lugar... Ese mismo lugar que era, pero ya no es.